SAPPADA, Italia
AP
Simon Yates se llevó su tercera victoria en el Giro de Italia, ganando ayer la 15ta etapa para consolidar su ventaja en la punta de la carrera, que entra en su última semana.
El británico Yates se lanzó en un sprint a 17 kilómetros de la meta en la ruta de 176 kilómetros a través de los Dolomitas de Tolmezzo ya Sappada, luego de una difícil etapa de ascensos y descensos constantes.
El colombiano Miguel Ángel López rebasó a Tom Dumoulin para entrar segundo delante de un grupo de cinco ciclistas, 41 segundos detrás de Yates.
«Fue realmente duro desde el fondo de la subida. Aún me sentía bien, así que escogí momento para atacar”, dijo Yates, pasando trabajo para contener las lágrimas. «Ellos respondieron la primera vez pero entonces yo o intenté de nuevo y di todo lo que tenía para despegarme. Es fantástico. No sé por qué estoy un poco emotivo. Lo di todo”.
Yates está claramente en nivel diferente que sus rivales y es difícil imaginarse a alguien arrebatándole la camiseta rosa de líder. Yates extendió su ventaja sobre el campeón defensor Dumoulin a 2 minutos, 11 segundos. Domenico Pozzovino sigue tercero, 2:28 detrás.
El lunes es el último día de descanso en el Giro, antes de la contrarreloj individual, que es la especialidad de Dumoulin.
«Él puede reducir dos minutos de mi ventaja en la contrarreloj, en una sola etapa. Así que no está decidido”, dijo Yates. “Pero me siento feliz con lo que hice hoy”.
Sin embargo, Dumoulin piensa que Yates está en tan buena forma que es el favorito para llevarse la victoria general cuando la carrera termine en Roma el 27 de mayo.
«Está en tan buena forma que quizás puede lograr un buen registro también en la contrarreloj. Tendremos que ver”, dijo Dumoulin. “Incluso si yo tengo una excelente contrarreloj y él no y yo tomo la punta, aún será muy difícil. Él se está despegando de nosotros cada vez que quiere”.
Otro británico, Chris Froome, había regresado a la pelea con una victoria en Monte Zoncolan el sábado.
Pero el tetracampeón del Tour de Francia, que cumplió 33 años, tuvo un mal día y terminó casi cinco minutos detrás de Yates.