Bremen/Maguncia
DPA
El Borussia Dortmund empató ayer por 1-1 en campo del Werder Bremen y dejó escapar la ocasión para desplazar al Schalke del segundo puesto del campeonato alemán y asegurarse de antemano la clasificación directa a la Liga de Campeones cuando faltan dos fechas para el cierre.
Marco Reus abrió la cuenta con un remate soberbio en el minuto 19, pero Thomas Delaney igualó de cabeza justo antes del descanso. Ocho días después de humillar por 4-0 al Bayer Leverkusen, el equipo que dirige Peter Stöger dominó el balón pero se topó con un rival que lo presionó y también generó peligro.
El conjunto aurinegro no consiguió aprovechar un abanico de ocasiones que protagonizó en el segundo tiempo, tres de las cuales acabaron contra el poste (Reus, a los 66′) o contra el travesaño (Manuel Akanji, a los 69′, y Jadon Sancho, a los 80′).
El Dortmund sigue tercero, en puesto de acceso directo a la Liga de Campeones. Acumula 55 puntos y una ventaja de cuatro unidades frente al quinto, Leverkusen. Los primeros cuatro puestos permiten la participación directa en la Champions.
El Werder Bremen continuó en el puesto doce y festejó el empate casi como un triunfo.
En el otro choque que completó la jornada 32 del fútbol germano, el Mainz doblegó por 3-0 al visitante Leipzig y volvió a salir de la zona de peligro.
El argentino Pablo De Blasis, a los 29 minutos, el suplente Alexandru Maxim, a los 85′, y el debutante Ridle Baku, en el último minuto del partido, firmaron los goles para el equipo del suroeste alemán que avanzó al puesto 14 de la tabla con 33 puntos.
Tras la jornada, el Mainz está décimo cuarto, con igual puntaje pero mejor diferencia de gol que el Freiburg, que el sábado derrotó al descendido Colonia. El puesto de promoción lo ocupa el Wolfsburgo, con 30, que perdió el sábado un partido vital ante el penúltimo, Hamburgo, con 28 unidades en el casillero.
