Budapest
AP
A un mes de cumplir 21 años, Caeleb Dressel puede presumir de haber igualado a un mito: con su victoria de ayer junto con el equipo de Estados Unidos en la posta 4×100 metros medley, el nadador empató en Budapest las siete medallas doradas que logró Michael Phelps en un mismo Mundial de natación.
La jornada final de los Mundiales de natación tenía reservada mucho emoción y Dressel se encargó de ponerle suspenso hasta el último instante: en la carrera que clausuraba el torneo, podía empardar la mítica cosecha de Phelps en los Mundiales de Melbourne en 2007.
Junto con sus compañeros Matt Grevers, Kevin Cordes y Nathan Adrian, el nadador nacido en Florida se impuso en la prueba de relevos con un registro de 3:27.91 minutos para lograr su séptima medalla dorada en el torneo.
Campeón en Budapest en los 100 metros mariposa y en los 50 y 100 libre, Dressel partió ayer en el tercer relevo y, tras su tramo de mariposa, dejó el triunfo encaminado a Adrian, que no tuvo inconvenientes para sellarlo.
Los restantes títulos del nadador de 20 años en Budapest fueron las postas 4×100 libre, 4×100 libre mixta y 4×100 medley mixta.
Dressel había marcado otro hito el sábado, cuando consiguió tres medallas doradas en una misma jornada, después de ganar los 50 metros libre, los 100 mariposa y la posta mixta 4×100 libre, con récord mundial incluido, junto a sus compañeros Adrian, Mallory Comerford y Simone Manuel.
Con sus siete títulos, Dressel igualó la cosecha de Phelps en los Mundiales de Melbourne en 2007, cuando el “Tiburon de Baltimore” consiguió su mayor cantidad de oros en estos torneos.
“Esto es una locura. Pero me han ayudado los equipos de relevos mixtos. Por lo tanto, es una situación ligeramente diferente”, aclaró Dressel.
Razón no le falta. Phelps estableció su marca en 2007, cuando la Federación Internacional de Natación (FINA) todavía no había implementado las postas mixtas en los Mundiales.
En aquel certamen, el legendario nadador estadounidense se impuso en los 100 y 200 metros mariposa, en los 200 y 400 metros medley, en los 200 metros libre y en las postas 4×100 y 4×200 libre.
A pesar de las diferencias, las comparaciones no tardaron en llegar, aunque Dressel prefiere evitarlas: “No quiero ser comparado con Michael. Me encanta Michael, lo amo hasta la muerte”, dijo el sábado, minutos después de su sexta medalla.
“No sé si les doy la bienvenida”, dijo sobre las comparaciones con Phelps. “Pero sé que van a venir. No creo que signifiquen una presión adicional para mí. Yo sólo quiero seguir haciendo lo mío aquí y en el futuro”.
Campeón olímpico en Río 2016 compartiendo posta con Phelps, Dressel se mostró orgulloso del mensaje que le envió su ex compañero: “Me escribió y me dijo ‘Buen trabajo’”.
Ajenos a los logros de Dressel y al triunfo de Estados Unidos en la posta 4×100 medley, el equipo de Reino Unido consiguió la medalla de plata con un tiempo de 3:28.95 minutos, mientras que Rusia subió al tercer lugar del podio con 3:29.76 minutos.
Récords y victorias: las grandes estrellas del Mundial de Budapest
La ausencia de Michael Phelps amagaba con opacar los Mundiales de natación de Budapest, pero el certamen confirmó o descubrió nuevas estrellas que mostraron todo su talento en la piscina del Danu Arena.
Aquí un listado de las grandes figuras que dejó Budapest 2017, con el brillo especial de Caeleb Dressel:
CAELEB DRESSEL: “Caelebrations”, tituló el boletín oficial de la Federación Internacional de Natación (FINA), en un juego de letras con el nombre de la gran figura del certamen. En su primera participación en los Mundiales, el estadounidense de 20 años se convirtió en una celebridad al igualar el récord de siete medallas doradas en un mismo torneo que su ídolo Michael Phelps había establecido en 2007. Es cierto que se benefició con las postas mixtas, que no existían hace diez años, pero logró algo que ningún nadador había conseguido antes, ni siquiera Phelps: ganar tres medallas doradas en una misma jornada.
KATINKA HOSSZU: La heroína local fue la encargada de levantar el ánimo de los fanáticos húngaros, que deliraron con cada una de las 15 veces que la nadadora de 28 años se arrojó a la piscina del Danu Arena. Su cosecha al final del certamen fue de dos medallas doradas, en los 200 y 400 metros medley, una plata en los 200 espalda y un bronce en los 200 mariposa. Más allá de los resultados, fue la principal atracción para el público.
LILLY KING: Con 19 años, la estadounidense ya había ganado el oro olímpico en los 100 metros braza (pecho) y en la posta combinada en Río 2016. En su debut mundialista en Budapest, se instaló definitivamente entre las estrellas con sus victorias con récords mundiales en los 50 y 100 metros pecho. Con la pruebas de relevos, sumó en total cuatro oros y tres plusmarcas mundiales.
KATIE LEDECKY: Otra de las grandes figuras estadounidense, pese a sus 20 años. Con cinco medallas doradas en Budapest, Ledecky llegó a 14 en total. Sin embargo, también sufrió la primera derrota de su carrera en Mundiales o Juegos Olímpicos y no pudo emular a su compatriota Missy Franklin con seis oros: la italiana Federica Pellegrini la sorprendió en los 200 metros libre y la obligó a conformarse con la plata.
ADAM PEATY: El británico ratificó su dominio en el estilo braza al ganar los 50 y los 100 metros, tal como lo había hecho hace dos años en Kazán. En Budapest, el nadador de 22 años se dio el lujo de bajar dos veces su récord mundial y convertirse en el primer hombre en bajar los 26 segundos en los 50 metros pecho.
SARAH SJÖSTRÖM: La sueca ratificó todos sus pergaminos en mariposa, con sus triunfos en los 50 y los 100 metros. Pero además se constituyó en la nadadora más veloz del mundo al batir los récords de los 100 y los 50 metros libre. En los 100, el oro se le negó porque la estadounidense Simone Manuel la batió en la final, pero en los 50 se tomó revancha. “Estoy contenta de haber logrado este récord mundial. Esto significa que soy la mujer más rápida en el mundo”, afirmó Sjöström.