Por Ignacio Encabo
Londres
AGENCIA/dpa
La pregunta, después de su espectacular primera mitad de la temporada, es más que lícita: ¿Puede el español Rafael Nadal volver a ganar el torneo de tenis de Wimbledon?
El campeón de 15 Grand Slam es el indiscutible «rey» de la arcilla, pero sus números en hierba pueden sorprender a aquellos aficionados que sólo recuerden sus dos títulos en Wimbledon, cuya edición de 2017 arranca el lunes.
Nadal jugó cinco finales seguidas en el All England entre 2006 y 2011 -en 2009 se ausentó por lesión- y cuenta sobre el sagrado césped con un balance total de seis victorias y tres derrotas ante Roger Federer, Andy Murray y Novak Djokovic en ese escenario. Sin embargo, lleva desde 2011 sin superar los octavos de final y acumuló varios capítulos amargos en las últimas temporadas.
Para que Nadal pueda sumar una tercera corona en Wimbledon tras las de 2008 y 2010, se tienen que dar varios factores: que sus rodillas le aguanten -la parte del cuerpo que más disgustos le dio-, que supere las dos primeras rondas y que tenga suerte en los cruces.
Aunque la segunda condición parezca una obviedad, no lo es tanto. Los dos primeros partidos en el tercer Grand Slam del año son claves para el español. Nadal superó la segunda ronda en siete ocasiones y en cinco de ellas alcanzó la final. Esos dos primeros encuentros resultan vitales porque el ex número uno llegará sin rodaje en hierba -no compite en esa superficie desde julio de 2015- y porque en la alfombra verde cualquier rival es complicado.
Pero una vez que su cuerpo se acostumbra a los automatismos del césped y la arena se apodera de la pista por el desgaste de los días, ahí sí, ahí puede surgir el nombre de Nadal como uno de los principales candidatos.
«Si las rodillas me aguantan, es una superficie que me divierte y me gusta, pero es una superficie en la que puede pasar de todo. Si soy capaz de pasar los dos primeros partidos, entonces cambia la historia», afirma Nadal, con 31 años recién cumplidos y que podría salir de Londres como nuevo número uno del ranking mundial.
