Ciudad de México/Las Vegas
DPA

El anunciado combate entre Saúl «Canelo» Álvarez ante el kazajo Gennady «GGG» Golovkin del próximo 16 de septiembre será el más importante de su carrera hasta ahora y servirá para saldar una vieja polémica.

Unos momentos después de superar con prestancia a su compatriota Julio César Chávez Jr., Álvarez anunció sobre el cuadrilátero del T-Mobile Arena el reto dirigido a Golovkin, que se encontraba en la primera fila del recinto a pesar de que había anunciado que no iba a presenciar la pelea.

«Tú eres el siguiente, mi amigo», le dijo Álvarez a Golovkin. La estrategia publicitaria funcionó a la perfección. La pelea entre mexicanos, muy comentada y que dio poco de sí, quedó sepultada por el anuncio del acuerdo entre ambos pugilistas para disputarse la corona mundial en el peso mediano.

Álvarez, de 26 años, se notó desafiante ante el kazajo. El mexicano llegará con 49 victorias, 34 por nocaut, una derrota y un empate. Tiene una racha de siete victorias consecutivas después de haber perdido claramente ante Floyd Mayweather Jr. en 2013.

Álvarez se enfrentará, según sus propias palabras, «al reto más grande» que ha tenido. Por ahora, Golovkin arranca favorito en las apuestas hasta por 4 a 1 por encima de Álvarez.

«Yo no le tengo miedo a nadie, cuando nací el miedo ya se había repartido», expresó el boxeador ante la euforia de los aficionados mexicanos.

«Va a ser (una pelea) difícil para ambos, pero extraordinaria, me siento emocionado», aseguró por su parte Golovkin a la prensa. «Es una pelea que no sólo yo quería y él (Álvarez) quería, sino que también mucha gente, el negocio mismo», explicó GGG, como se lo conoce al kazajo.

Golovkin también le confirmó a ESPN que «esperaba este combate desde hace dos años». «La pelea entre nosotros será muy diferente a la de Chávez Jr., no sé si habrá nocaut, esto es boxeo, ambos somos poderosos», aseveró el campeón mundial.

El kazajo, de 35 años, es, según los expertos, uno de los mejores boxeadores libra por libra en el mundo. Tiene un invicto de 37 peleas, 33 de ellas por nocaut, y es el actual campeón del mundo en peso mediano.

Álvarez intentará recuperar el cinturón que ganó en 2015 ante el puertorriqueño Miguel Cotto en 2015 y que defendió de manera exitosa ante el británico Amir Khan en mayo de 2016, antes de que el Consejo Mundial de Boxeo (CMB) decidiera darle su cinturón de campeón a Golovkin por no enfrentarlo.

«La era del ‘Canelo’ es la mejor porque peleo contra los mejores», aseveró Álvarez al canal HBO, ante los cuestionamientos de que había rehuido una pelea ante uno de los mejores boxeadores de su división. «Cuando llegue el momento, estaré mejor preparado que ahora», agregó.

Ahora, el combate que todavía no tiene sede definida, también terminará con la polémica sobre si aquella decisión fue justa.

«Hay interés de todo el mundo. He recibido llamadas de Dubái y del Reino Unido, que buscan ser la sede de la pelea, las conversaciones comenzarán muy pronto», aseguró Óscar de la Hoya, ex boxeador y promotor del «Canelo» Álvarez en la rueda de prensa posterior al combate con Chávez Jr.

«Queremos que el mejor boxeador gane. Esta pelea es una de las más esperadas junto a la de Mayweather contra (Manny) Pacquiao, pero la diferencia es que este combate tendrá más acción, no van a parar», añadió De la Hoya.

El combate, tal y como ocurrió entre Álvarez y Chávez Jr., se llevará a cabo en una fecha especial para el público mexicano: el 16 de septiembre, día de la Independencia del país.

En el final de su cara a cara en el cuadrilátero, Golovkin le deseó «buena suerte» para su combate. Álvarez respondió que «la suerte era para los mediocres». En septiembre, la categoría mediana tendrá por fin a un incontestable campeón mundial.

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