Por PAUL ATTFIELD
TORONTO
AGENCIA/AP
Jugar sin tres astros puede significar una derrota casi segura para varios equipos de la NBA. No para los Spurs de San Antonio.
Sin Kawhi Leonard, Tony Parker ni Pau Gasol, los Spurs hallaron la manera de superar ayer 108-106 a los Raptors de Toronto, con lo que hilvanaron su quinta victoria consecutiva.
«Algo que tenemos acá es que lo importante es el sistema», resaltó LaMarcus Aldridge. «Este equipo ha sido bueno durante años haciendo que los chicos se adapten al sistema. Aquí tratamos de que los jugadores puedan acoplarse y realizar el trabajo».
Aldridge lideró a los Spurs con 21 puntos, mientras que Patty Mills añadió 18 saliendo de la banca y otro reservista, Davis Bertans, ayudó con 12.
Los Spurs mejoraron a una foja de 36-9, su tercer registro más destacado tras 45 encuentros. En 2010-11 y 2015-16 ostentaron un récord de 38-7. Asimismo, mejoraron a una foja de 20-4 como visitantes. Son el octavo equipo en la historia de la NBA que gana 20 de sus primeros 24 compromisos en cancha ajena, de acuerdo con NBA Stats.
«Hubo un par de veces en que hemos tenido a algunos chicos fuera, y en el pasado siempre hemos tenido la mentalidad de que quienes juegan deben hacer el trabajo, y siempre lo han hecho», dijo Danny Green. «Creo que simplemente tenemos esa química, los jugadores tienen confianza y toman la estafeta».
San Antonio completó la barrida en la serie contra los Raptors en la temporada. Les había ganado 110-82 en Texas a comienzos de este mes.
Kyle Lowry coló 30 puntos y el suplente Terrence Ross añadió 21 para los Raptors, que han perdido cuatro en fila por primera vez desde el 4-10 de marzo de 2015.
En un último período en el que la delantera cambió de dueño ocho veces, los Spurs se encaminaron a la victoria con el enceste del novato Dejounte Murray con 1:29 en el reloj.
Norman Powell de los Raptors falló un triple al sonar la chicharra.
El argentino Manu Ginóbili aportó ocho puntos para los Spurs.
