Melbourne
DPA

El serbio Novak Djokovic entregó hoy su corona de campeón en el Abierto de tenis de Australia ante el número 117 del ranking mundial, el uzbeco Denis Istomin, en una jornada en la que español Rafael Nadal pisó el acelerador hacia la tercera ronda.

Después de cuatro horas y 48 minutos de partido, un marcador de 7-6 (10-8), 5-7, 2-6, 7-6 (7-5) y 6-4 sepultó las aspiraciones de Djokovic por estirar su reinado en Australia, donde buscaba convertirse en el primer tenista de la historia en levantar siete títulos.

Istomin, que a sus 30 años sólo había celebrado un triunfo en 33 partidos ante jugadores del «top ten», dejó boquiabiertos a los cerca de 15 mil espectadores que llenaron las gradas de la Rod Laver Arena, esa pista que es auténtico «territorio Djokovic».

«No estoy acostumbrado a perder aquí en la segunda ronda. En los últimos diez años gané seis títulos, jugué tan bien aquí, lo pasé tan bien en esta pista… Es decepcionante, pero tengo que aceptarlo», analizó el campeón de 12 Grand Slam. «Es uno de esos días en los que no te sientes tan bien en la cancha, no tienes tanto ritmo, y el rival siente la pelota muy bien».

Djokovic ha conquistado las seis finales que ha disputado en Australia y llegaba al duelo de hoy tras haber ganado 39 de los últimos 40 partidos que había jugado en Melbourne Park. Esos datos, más la reciente final de Doha, en la que se impuso a Andy Murray, convertían al número dos en el gran favorito.

El primer juego fue el preludio perfecto de lo que iba a ser el partido. Quince minutos de game y seis pelotas de break para Istomin, que sin embargo no pudo convertir ninguna.

El serbio tuvo dos pelotas para apuntarse el primer parcial en el tie break, pero Istomin las salvó y acabó adelantándose en el marcador tras 85 minutos de set.

No se calmó el número 117 del ranking y el partido siguió la misma línea: cada punto era un winner o un golpe no forzado. La derecha de Istomin era pura potencia y colocación.

Con 5-4 para Istomin y Djokovic al saque, el serbio salvó dos pelotas de set con dos certeros primeros saques y más tarde empató el partido. Y todo parecía ponérsele de cara cuando se llevó además el tercer set por un cómodo 6-2.

Pero la raqueta de Istomin aún tenía muchas derechas planas que soltar. Y la de Djokovic algún que otro error que cometer. Se fue hasta los 72 errores no forzados.

Tras cerrar el tercer set con un ace, Istomin rompió en el 2-2 del quinto con con un tremendo revés paralelo. Acompañó el golpe con un alarido que retumbó en la Rod Laver Arena.

Istomin, que llegó a ser 33 del ranking en 2012 y cuyo único título llegó sobre la hierba de Nottingham en 2015, se rompió una pierna en un accidente de coche en 2011 cuando viajaba a un torneo y estuvo tres meses en el hospital. No tocó una raqueta en dos años y los doctores dudaban de que pudiera volver a competir. Hoy consiguió la victoria más importante de su vida.

NADAL Y PASO FIRME EN AUSTRALIA

El español venció al chipriota Marcos Baghdatis por 6-3, 6-1 y 6-3 en otra demostración de que su derecha está de vuelta y de que luce un estado físico impecable.

Fresco de piernas y valiente, el número nueve del ranking y campeón de Australia en 2009 se medirá el sábado a Alexander Zverev, una de las grandes perlas de la nueva generación. El alemán es, con 19 años, el número 24 del ranking.

El canadiense Milos Raonic, tercer favorito, derrotó al luxemburgués Gilles Muller por 6-3, 6-4 y 7-6 (7-4) y chocará en la siguiente ronda con el francés Gilles Simon.

Por su parte, el austríaco Dominic Thime sufrió más de lo previsto ante el australiano Jordan Thompson, al que batió por 6-2, 6-1, 6-7 (6-8) y 6-4. También se dejó un set el sexto cabeza de serie, Gael Monfils, que superó al ucraniano Alexander Dolgopolov por 6-3, 6-4, 1-6 y 6-0.

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