Londres
DPA
El futbolista marfileño Yaya Toure, del Manchester City, negó hoy haber conducido en estado de ebriedad a pesar de que un juez decidió ayer retirarle el carnet por un positivo en un control.
Toure explicó que como musulmán tiene prohibido el consumo de alcohol y aseguró que el juez aceptó su versión de que no bebió de forma intencionada. Sin embargo, la sentencia deja al centrocampista sin licencia para los próximos 18 meses.
«Como di una tasa por encima del límite permitido, decidí no apelar. Sin embargo, para mí era importante decir a la corte que no consumí alcohol de forma intencional. Y en su sentencia, el jurado subrayó que lo aceptó», señaló Toure, de 33 años, en un comunicado.
Según medios locales, los hechos ocurrieron en los últimos días de noviembre en Londres, cuando Toure fue sometido a un control de alcoholemia por parte de la policía.
«Siempre rechacé el alcohol», aseguró Toure en su comunicado. «Cualquiera que me conozca o siga el fútbol habrá visto que rechazo el champagne en las celebraciones por mi compromiso con la religión».
Toure apenas contó esta temporada para el nuevo entrenador de Manchester City, el español Josep Guardiola, después de que el agente del jugador y el técnico se enzarzaran en una guerra dialéctica. Recién hace unas semanas el marfileño volvió a una convocatoria.