Ciudad de México
DPA
Nadie se salva de las habilidades hipnóticas del goleador francés André-Pierre Gignac: ni las defensas rivales, ni sus compañeros de Tigres ni la afición del club.
Con cinco goles en sus últimos tres encuentros de la fase decisiva, el atacante galo guió a Tigres a la final del futbol mexicano, en la que se medirá al América.
No se trata de una estadística del todo sorprendente en un atacante de la calidad de Gignac, salvo por un detalle: todos los goles llegaron después de someterse a unas sesiones de hipnotismo que parecen haber liberado al artillero.
En la fase de cuartos de final, hizo un «hat-trick» en la goleada por 5-0 ante los Pumas de la Universidad de México. El triunfo le dio a Tigres el billete a las semifinales con un marcador global de 7-2.
En el cotejo de ida de las semifinales, Gignac marcó el tanto que le dio a Tigres una victoria por 1-0 ante el León en el Nou Camp y en la vuelta, jugada el sábado por la noche, mantuvo su cuota goleadora.
Marcó uno de los dos goles con los que el plantel de la Universidad Autónoma de Nuevo León se impuso por 2-1 al León y se clasificó a la final del torneo Apertura 2016 con un marcador global de 3-1.
Gignac celebró su quinta diana con una señal de agradecimiento al hipnotista John Milton. Se plantó frente a la tribuna y extendió el brazo y los dedos de la manos derecha como si tratara de dormir a los aficionados.
Luego hizo lo mismo frente a los suplentes que estaban a un lado de la cancha: extendió los dos brazos y los jugadores siguieron la broma y se dejaron caer en grupo ante la mirada feliz del técnico de Tigres, Ricardo Ferretti.
Y no era para menos, ya que Gignac se ha reencontrado con los goles después de que durante nueve jornadas saliera con la pólvora mojada.
Gignac se sometió a sesiones de terapia de hipnosis en un intento por acabar de una vez por todas con su racha negativa. Y el especialista Milton aseguró que en el caso del futbolista hizo un «trabajo de hipnosis seria».
«En mi caso se utilizaron técnicas de hipnosis profunda. Después de venir de una sequía goleadora, se destapa la semana pasada con tres goles», expresó Milton sobre las sesiones para devolver a Gignac su cualidad goleadora, esa misma que lo llevó a vestir la casaca de la selección francesa.
Su caso llamó la atención de toda la prensa mexicana, que quedó cautivada con los goles y los dones del delantero.
«Finalista que hipnotiza», destacó ayer el diario «El Universal» en su sección deportiva y exhibió en su primera plana una foto en la que se ve a Gignac con la mano derecha extendida como si tratara de hipnotizar a los hinchas en el estadio Universitario.
«El francés hipnotizó a todos en el estadio, primero al abanderado que no lo vio en fuera de lugar tras recibir por derecha un pase de Jorge Estrada, luego a la zaga, al quebrar a Guillermo Burdisso y definir cruzado de zurda y por último a la afición, con la que festejó el tanto al estilo del hipnotista John Milton», se lee en la sección deportiva de «Reforma».
Tras el éxito de las sesiones, nadie duda de que Gignac seguirá acudiendo al especialista con vistas a la gran final, donde intentará hipnotizar una vez más a las defensas rivales.
