Oakland
DPA

Los Golden State Warriors, máximos favoritos al título en la NBA, cayeron arrollados en casa por 129-100 ante los San Antonio Spurs en el debut de la temporada regular en la liga norteamericana de baloncesto.

«Creo que los chicos se avergüenzan de su rendimiento», se lamentó el entrenador local, Steve Kerr, tras el partido disputado ayer. «Yo al menos lo hago».

Los Warriors fueron totalmente superados sobre todo en el aspecto defensivo. «Si no rebotean, no ganarán ningún título», había advertido en pretemporada la ex estrella de la NBA Charles Barkley.

El primer partido, al menos, le da la razón. Con 55-35, los Spurs mandaron claramente bajo los tableros.

En su primer partido sin el retirado Tim Duncan, los visitantes se apoyaron principalmente en el dúo formado por Kawhi Leonard (35 puntos) y LaMarcus Aldridge (26). La eficacia desde la línea de tres puntos también les ayudó, con 12 conversiones de 24 intentos.

En su primer partido oficial con los Spurs, el español Pau Gasol tuvo una discreta actuación con dos puntos y cuatro rebotes en algo más de 18 minutos de juego. El argentino Emanuel Ginóbili salió desde el banquillo y aportó diez tantos.

La victoria de los cinco veces campeones de la NBA nunca estuvo en peligro. «Los Spurs atropellan a los Warriors», escribió ESPN.

Sólo Kevin Durant, con 27 puntos, y Stephen Curry, con 26, ofrecieron resistencia en Golden State, que el año pasado deslumbró en la temporada regular con un nuevo récord histórico de 73 victorias en 82 partidos.

Pese a que perdieron en la final, los Warriors parten como principales candidatos al anillo este año tras el fichaje este verano boreal de Durant, gran estrella de Oklahoma City Thunder y varias veces máximo anotador de la liga.

Por el contrario, los actuales campeones, Cleveland Cavaliers, hicieron un debut a la altura y derrotaron sin problemas a los New York Knicks por 117-88.

Además de Kyrie Irving (29 puntos) y Kevin Love (23), en los anfitriones brilló sobre todo su máxima estrella, LeBron James, que hizo un triple-doble con 19 puntos, 13 asistencias y 11 rebotes.

Antes del comienzo del partido se desplegó el estandarte de campeón bajo el techo del pabellón Quicken Loans Arena y se entregaron los anillos de campeones.

«Fue fantástico vivir un momento así», dijo James. «Fue muy difícil concentrarse en el partido, pero hicimos un gran trabajo. Sobre todo en la segunda mitad».

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