Madrid
DPA

Está demostrado que el Real Madrid domina las pruebas de esfuerzos cortos, como puede ser la Liga de Campeones, pero el gran reto del conjunto blanco para la próxima temporada es confirmar que también es capaz de rendir en una carrera de fondo como es la Liga española de futbol.

Un solo título en ocho años parece un logro muy exiguo para un club que anualmente mueve más de 600 millones de euros de presupuesto y que tiene a algunos de los mejores futbolistas del planeta, como son los casos de Cristiano Ronaldo, Gareth Bale, Sergio Ramos y demás.

El último de sus 32 entorchados -más que nadie y ocho más que el Barcelona- llegó en 2012, con José Mourinho como entrenador, en una Liga en la que alcanzó la mágica cifra de los 100 puntos. Desde entonces, tres títulos fueron para el Barcelona y uno para el Atlético de Madrid.

Reconocida su capacidad para competir extraordinariamente en la Liga de Campeones -seis semifinales consecutivas y dos títulos en los últimos tres años- ahora el Real Madrid está obligado a demostrar que puede romper la hegemonía, casi dictadura, que ejerció el Barcelona en España durante la última década.

El pasado año estuvo cerca de lograrlo, pues quedó a un punto del conjunto azulgrana, al que obligó a pelear el título hasta la última jornada gracias a una prodigiosa reacción en los dos últimos meses, aunque inconclusa finalmente.

En la anterior edición, el Real Madrid se vio lastrado por las enormes convulsiones ocurridas en la primera parte de la temporada, que incluyeron la destitución del técnico español Rafael Benítez en enero y la llegada del inexperto Zinedine Zidane al exigente banquillo blanco.

El francés logró lo que nadie pensaba a comienzos de año: reflotar un equipo que marchaba a la deriva, ganar la Liga de Campeones y quedar a un partido de conquistar la Liga.

Ahora, la misión de Zidane es mantener en guardia a un equipo que suele sufrir en Liga unas distracciones que luego acaba pagando caras. La esperanza de los hinchas blancos es que, a diferencia de lo que ocurría con Benítez, los futbolistas creen en su entrenador y éste les pide actitud continuamente.

«No estamos para lamentaciones ahora. No ganamos la Liga, pero hemos ganado la Champions y la Supercopa. Estamos preparados para luchar de nuevo contra Barça y Atlético», aseguró el capitán blanco, Sergio Ramos, recientemente.

Para el reto de la Liga española, el Real Madrid cuenta con un plantel muy profundo y al que de momento apenas agregó dos elementos que, además, ya eran conocidos. Recuperó al delantero Álvaro Morata tras dos años satisfactorios en la Juventus y decidió quedarse con el joven talento que es Marco Asensio tras un año cedido en el Espanyol. Muy poco para todo lo que le gusta agitar el marcado a Florentino Pérez, su presidente.

El Real Madrid ganó ayer el Trofeo Santiago Bernabéu al superar al Stade de Reims francés por 5-3 en lo que fue la presentación los blancos ante su hinchada en su último amistoso de pretemporada.

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