Madrid
DPA
El Real Madrid finalizó su gira estadounidense con un triunfo ante el Bayern Múnich en Nueva York e inició la cuenta atrás para la Supercopa de fútbol de Europa que jugará el martes ante el Sevilla, una cita muy exigente a la que los blancos llegarán con tantos claros como sombras.
El equipo de Zinedine Zidane aterrizó hoy en Madrid después de disputar tres partidos de preparación con un balance de dos victorias y una derrota. Ganó 3-2 al Chelsea y 1-0 al Bayern Múnich, pero cayó 3-1 ante el Paris Saint-Germain en su primer encuentro.
Pero más que los resultados, a Zidane le interesan cosas más profundas, como la propuesta de juego y la respuesta de los futbolistas. En este sentido, se pudo adivinar a qué quiere jugar su equipo: presión muy adelantada, cuidado de la pelota y transiciones rápidas. Pero aún no sabe cómo hacerlo, especialmente porque todavía no cuenta con buena parte de sus mejores futbolistas.
«La gira ha tenido un balance positivo. El equipo está preparado para la Supercopa de Europa porque después de tres partidos y de tres semanas de trabajo estamos preparados para jugar el martes. Será nuestro primer partido importante», analizó Zidane tras el triunfo ante el Bayern, resuelto con un gol de Danilo desde fuera del área.
Ahora regresa a la tranquilidad de su Ciudad Deportiva en la capital española y allí, a diferencia de lo que tuvo en Estados Unidos, se encontrará con campos con la hierba mejor segada. También con un inmenso calor.
A partir de ahora, el Real Madrid activa el reloj para ir recuperando futbolistas y, sobre todo, para intentar mejorar la preparación física de los que se fueron incorporando más tarde. La propuesta futbolística de Zidane tiene una alta exigencia que ahora mismo el equipo no puede afrontar.
Es bastante probable que ante el Sevilla no pueda contar con ninguno de sus tres delanteros titulares, la famosa «BBC». Cristiano Ronaldo será baja segura al estar de vacaciones tras una desgastante temporada que culminó el 10 de julio con la conquista de la Eurocopa y Gareth Bale tiene casi imposible llegar, como el propio Zidane auguró.
Más opciones es Karim Benzema, quien no jugó ni un minuto en los tres partidos de la gira por problemas en la cadera. Todo dependerá de su evolución en los próximos entrenamientos.
Con Jesé cerca de salir del Real Madrid, probablemente con destino al Paris Saint-Germain, Álvaro Morata es el único delantero puro con el que cuenta el equipo en estos momentos. El madrileño, única incorporación por ahora del club para la nueva temporada, todavía no está a punto y no marcó en los tres encuentros de preparación que jugó en su regreso al equipo blanco.
Otros jugadores -como Luka Modric, James Rodríguez o Sergio Ramos- están muy faltos de fondo físico. «Es el proceso normal para los jugadores que inician la competición después del descanso de verano», reconoce un Zidane que no parece demasiado preocupado por la cercanía del primer título oficial.
A cambio, los futbolistas que comenzaron la pretemporada desde el inicio -Marcelo, Raphael Varane, Isco o el joven Marco Asensio- sí están ofreciendo un buen rendimiento.
Además de Cristiano Ronaldo y Gareth Bale, el Real Madrid todavía espera a Pepe y Toni Kroos, otros dos jugadores que apuran sus vacaciones. Es decir, otros dos titulares.
