Río de Janeiro
DPA
A menos de 15 días para que inicien los Juego de Río 2016, ya se registraron los primeros problemas en la apertura de la Villa Olímpica en Río de Janeiro: la delegación de Australia aplazó su entrada a uno de los edificios inaugurados ayer en el oeste de la ciudad, tras quejarse del mal estado de las instalaciones que deben albergar a más de 10 mil atletas durante los Juegos Olímpicos.
El Comité Olímpico Australiano emitió especialmente un comunicado para quejarse de una Villa a la que no ve ni «segura» ni «lista» para ser habitada, a menos de dos semanas para el comienzo de los Juegos.
«Debido a una variedad de problemas en la Villa, incluidos el gas, la electricidad y la plomería, he decidido que ningún miembro del equipo australiano entrará a nuestro edificio», explicó su posición la jefa de misión australiana, Kitty Chiller, en un comunicado.
La televisión brasileña mostró a los atletas marchándose de la Villa, el mismo día en que ésta abría sus puertas en Barra da Tijuca, uno de los barrios más acomodados de la metrópoli brasileña.
Los problemas incluyen «baños bloqueados, tuberías que gotean, cables de electricidad expuestos, escaleras oscuras sin instalaciones de luces y suelos sucios», señaló Chiller. También se quejó de agua goteando de los techos y formando charcos cerca de cables eléctricos.
Chiller aseguró asimismo que los miembros de la delegación australiana presentaron sus preocupaciones a diario a los organizadores desde hace una semana, antes de la llegada de sus atletas.
«Hemos estado presionando duro por una solución», escribió. Un diario australiano había calificado antes a la Villa Olímpica como «inhabitable». Según Chiller, las delegaciones de Reino Unido y Nueva Zelanda tuvieron experiencias similares con sus instalaciones.
El Comité Organizador de Río 2016 admitió poco después los problemas. «Cuando las habitaciones empezaron a ser usadas en todos los edificios, quedó claro que algunas de las habitaciones necesitaban trabajo adicional», señaló el comité en un comunicado.
Grupos de trabajadores «han trabajado toda la noche y seguirán trabajando 24 horas al día hasta que los problemas estén resueltos», prometió el Comité. «Lamentablemente consideramos que eso tardará unos días».
Los organizadores aseguraron además que reubicarán a los atletas cuyas habitaciones no estén listas en otros edificios. Según el diario Folha de Sao Paulo, el Comité contrató a 500 empleados extra para trabajar en las obras inconclusas.
«Lamentamos cualquier inconveniente que esto pueda causar y apreciamos la comprensión del Comité Olímpico Nacional durante este tiempo», apuntaron los organizadores de Río 2016.
La «Villa de los Atletas» debe albergar a unos 10 mil deportistas de todo el mundo durante los Juegos Olímpicos que se celebran en Río entre el 5 y el 21 de agosto.
Las instalaciones, que cuentan en total con 31 edificios, están ubicadas a 1,5 kilómetros del Parque Olímpico, en la propia Barra da Tijuca. El barrio de clase media y alta será el epicentro de los primeros Juegos Olímpicos celebrados en Sudamérica.
Según el Comité Olímpico, unos 13 mil trabajadores y colaboradores se ocuparán en la Villa de los deportistas de más de 200 países.
Las instalaciones fueron construidas por un inversor privado, pero los detalles interiores están a cargo del Comité. En total hay 3.604 apartamentos. En las semanas anteriores, varios visitantes se habían mostrado ya escépticos por las instalaciones espartanas dentro de las habitaciones.
