París/Marsella/Niza
DPA
La UEFA amenazó hoy a través de un comunicado a las Federaciones de Fútbol de Rusia e Inglaterra con expulsarlas de la Eurocopa de Francia en caso de que sus hinchas repitan los incidentes de violencia que protagonizaron el sábado en Marsella.
«No dudaremos en imponer sanciones adicionales a las federaciones, incluida la potencial descalificación de sus equipos, si la violencia actúa de nuevo», señaló en su comunicado la confederación europea, máxima responsable del torneo en Francia.
«Un comportamiento inaceptable de esos llamados ‘hinchas’ no tiene cabida en el fútbol, un deporte que tenemos que proteger y defender», agregó.
La UEFA (Unión Europea de Fútbol Asociado) se basa en el artículo 65 de sus estatutos, según el cual el comité ejecutivo puede imponer sanciones «legales y conformes al derecho» ante situaciones como la vivida en Marsella. Nunca en la historia del torneo se produjo la expulsión de una selección por estos motivos.
Una amenaza de una exclusión de la Eurocopa se registró por última vez en el 2000, también contra Inglaterra, tras los disturbios protagonizados por sus ultras en la localidad belga de Charleroi.
Las imágenes de los «hooligans» ingleses, uno de los cuales permanece en estado grave, y rusos en una batalla campal en el centro de Marsella dieron la vuelta al mundo en las últimas horas. Según la policía de la ciudad, hay 35 heridos y diez detenidos.
Distintos grupos provocaron destrozos, se lanzaron sillas, botellas y objetos y se golpearon con barras de hierro, entre otros elementos. La policía intercedió con gas lacrimógeno y detuvo a seis personas. Según informan medios locales, en los altercados también participaron hinchas franceses.
Después, la violencia se trasladó a las gradas del estadio Velodrome durante el partido, que terminó 1-1, unas secuencias que no se vieron en televisión por orden de la UEFA. Algunos espectadores ingleses tuvieron incluso que saltar al campo de juego para protegerse.
La Eurocopa desplegó un dispositivo de seguridad prácticamente inédito en el deporte después de los atentados terroristas perpetrados por el Estado Islámico en Europa en los últimos meses. Los primeros problemas, no obstante, los produjeron los «hooligans».
El ministro de Interior de Francia, Bernard Cazeneuve, calificó los hechos como «un comportamiento irresponsable y malicioso de los ‘pseudo-fans'».
La Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA), por su parte, reaccionó opinando que los organizadores de Rusia 2018 podrán sacar conclusiones y analizar el plan de seguridad para el Mundial y la Copa Confederaciones 2017, según dijo a dpa un portavoz del organismo.
Sin embargo, el ministro de Deportes de Rusia, Vitaly Mutko, respondió: «¿Qué tiene que ver el Mundial de 2018 con esto?»
La UEFA anunció en la mañana de hoy la apertura de un expediente disciplinario contra la federación rusa -sobre la inglesa no se pronunció en un primer momento- y añadió que el Comité de Disciplina tomará el martes una decisión sobre la sanción. La UEFA acusa a Rusia de presunto comportamiento racista y encendido de bengalas.
Al mismo tiempo, la UEFA admitió que hubo problemas en Marsella con la separación de los aficionados y anunció que reforzará las medidas de seguridad en los estadios para los próximos partidos.
En consecuencia, se trabajará más en cooperación con las autoridades locales para que se incremente el número de policías en los estadios, comunicó la entidad.
Mutko, que además de ministro de Deportes ruso es alto dirigente de la FIFA, criticó la mala organización en el estadio Velodrome.
«Hay que organizar bien este tipo de partidos y separar a los hinchas. No había redes de protección contra las bengalas», dijo Mutko. «Si identificamos a los responsables, los vamos a castigar», anunció el influyente político ruso.
Por su parte, Viajeslav Koloskov, dirigente de la Federación Rusa, dijo que no espera una deducción de puntos para Rusia. «Lo máximo será probablemente una multa fuerte», dijo en Moscú antes de conocer las amenazas de la UEFA. También enfatizó que las medidas de seguridad en Marsella fueron insuficientes.
El encuentro estaba catalogado entre los partidos de más alto riesgo de la primera fase -hinchas ingleses y rusos ya protagonizaron un violento encuentro en Marsella en el Mundial de 1998- y unos 1.200 efectivos fueron movilizados en la ciudad mediterránea por el encuentro.
En ocasiones anteriores, la UEFA aplicó multas cuando se trata de una primera vez. Sin embargo, los aficionados rusos ya protagonizaron incidentes en la Eurocopa 2012 en Polonia.
El Gobierno británico, por su parte, ofreció hoy a Francia enviar fuerzas de seguridad adicionales que podrían colaborar con la policía local durante los próximos partidos que juegue Inglaterra en la fase de grupos de torneo.
Inglaterra jugará su próximo partido el jueves en Lens ante Gales, mientras que los rusos chocarán un día antes en Lille con Eslovaquia.