Barcelona
DPA
La trigésimo segunda fecha de la Liga española de futbol vivirá mañana una jornada de lo más intensa con los tres primeros clasificados en juego y muchas dudas por despejar.
Las despierta el Barcelona, que acude a la cancha de la compleja Real Sociedad, después de caer en el clásico ante el Real Madrid en la pasada fecha, y de recuperarse tres días después, no sin dificultad, en la ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones europea frente al Atlético de Madrid.
Las despiertan también los rojiblancos, que visitan a un Espanyol en racha, tras el tremendo desgaste sufrido frente a los azulgrana en el Camp Nou, donde jugaron 55 minutos con diez hombres.
Y no menos el Real Madrid, que aspira a sumar su sexta victoria consecutiva en la Liga ante el Eibar, después de sorprender al Barcelona en el clásico para caer luego, inopinadamente, ante el Wolfsburgo en la Champions.
Los dirigidos por Zinedine Zidane, que se juegan la temporada el próximo martes en la vuelta de los cuartos europeos ante el modesto equipo alemán, pretenden empezar a caldear el ambiente para la esperada remontada europea del estadio Santiago Bernabéu con un triunfo mañana ante el conjunto vasco.
«El martes nos jugamos la temporada y lo sabemos. Al público le gusta también eso y a mí me gusta cuando las cosas se ponen difíciles», afirmó Zidane con su sonrisa perenne.
Noveno en la clasificación, el Eibar apenas ganó tres partidos lejos de su estadio en lo que va de temporada, mientras el Real Madrid sólo cedió dos derrotas y un empate frente a su público, que exige una victoria que, además, siga presionando al Barcelona y al Atlético.
«Pondré al mejor equipo y Cristiano Ronaldo jugará, pero habrá rotaciones», anunció Zidane, que no podrá contar con los aún tocados Karim Benzema y Raphael Varane ni con el sancionado Sergio Ramos.
Siete puntos separan ahora a los blancos del Barcelona, que en Anoeta afrontará «la salida más complicada de la Liga», según su entrenador Luis Enrique.
«Ante la Real nos tenemos que mostrar fuertes y contundentes. Es una salida dificilísima para nosotros, la más complicada de toda la liga», afirmó hoy Luis Enrique.
La temporada pasada, una derrota en Anoeta a inicios de 2015 desató la crisis más profunda de los azulgrana y, para muchos, también provocó el impresionante remonte del Barcelona, que acabó conquistando el ansiado «triplete».
No lo cree así Luis Enrique, que mañana no dispondrá de su tridente ofensivo al completo por la sanción del uruguayo Luis Suárez.
Es posible que Diego Simeone introduzca también algún cambio en el once del Atlético, que se medirá al Espanyol aún sin el uruguayo José María Giménez y con la duda del montenegrino Stefan Savic.
