Pekín
Agencia dpa
El tenista serbio Novak Djokovic aseguró que el hecho de haber perdido la final de Roland Garros en junio fue una de las razones por las que ganó después Wimbledon y el Abierto de Estados Unidos.
«No puedo arrepentirme de nada este año. Creo que la final de Roland Garros fue muy emocional, pero ocurrió por alguna razón», dijo hoy Djokovic en Pekín, donde defenderá el título a partir de mañana.
«Por perder ese partido creo que voy a los Grand Slam con más ganas. Creo que eso fue gran parte de mi éxito en Wimbledon y el US Open», añadió el número uno del ranking mundial.
El serbio, que en enero había conquistado el Abierto de Australia, cayó en la final de París ante el suizo Stanislas Wawrinka, que le negó el único Grand Slam que le falta en el palmarés.
«Haber ganado tres de los cuatro grandes y haber jugado otra final no es nada decepcionante. Es lo mejor que se puede tener. Un partido más y habría sido perfecto».
Djokovic indicó que no puede imaginarse una temporada mejor que la que está teniendo en 2015, en la que acumula siete títulos, tres de ellos de Grand Slam, y se mantiene inamovible en lo más alto del ranking.
«No me gusta pensar dónde están mis límites. Intento pensar en el momento, usar mi imaginación y entonces las posibilidades se vuelven ilimitadas», explicó el balcánico.
Djokovic se enfrentará en la primera ronda de Pekín al italiano Simone Bolelli y la próxima semana viajará a Shanghai para intentar sumar otro Masters 1000 a su palmarés.
