Liverpool (Reino Unido),
Agencia dpa
El equipo conducido por Carlo Ancelotti chocará con el rival más poderoso del Grupo B, el mismo al que todavía no pudo derrotar en competiciones oficiales.
«Lo estamos haciendo bien. Ganamos los dos primeros partidos y cumplimos nuestro primer objetivo. Ahora tendremos que afrontar uno de los dos partidos contra el Liverpool, que seguramente definirán nuestra posición en el grupo. Queremos hacerlo bien», afirmó Alvaro Arbeloa en declaraciones a la web de la UEFA.
El conjunto de la capital española se enfrentó en tres oportunidades a los británicos y perdió en todas las ocasiones.
El Liverpool se impuso por 1-0 en la final de la Copa de Europa 1981 y también derrotó a los blancos en los dos partidos de los octavos de final de la Liga de Campeones 2008/09: 1-0 en el estadio Santiago Bernabéu y 4-0 en el duelo de vuelta, en Anfield.
Así y todo, el actual campeón de Europa dispone de una oportunidad perfecta para romper la racha maléfica: llega al duelo con puntaje perfecto en la Champions, con contundencia en su juego, y se enfrenta a un rival que no termina de hacer pie en el campeonato europeo ni en la liga inglesa.
El Real Madrid buscará terminar la primera rueda de la fase de grupos con tres victorias en tres encuentros disputados, mientras que el Liverpool tratará de reponerse de la última caída por 1-0 ante el Basilea.
El conjunto comandado por Carlo Ancelotti presentará pocas variantes en su alineación inicial respecto a su equipo de gala.
El Real Madrid afrontará el choque en Anfield apenas tres días antes de disputar el clásico del fútbol español con el Barcelona.
Por eso, Ancelotti decidió marginar de la convocatoria a Sergio Ramos, a Gareth Bale y a Fabio Coentrao, todos con problemas físicos.
El central no se pudo recuperar todavía de unas molestias en el sóleo de la pierna derecha; el galés padece una lesión en el músculo piramidal derecho y el lateral arrastra problemas en los ligamentos cruzados de la rodilla derecha.