Por JUSTIN BERGMAN,
BEIJING
Agencia AP
Djokovic estuvo cerca de propinar una derrota contundente de dos sets de 6-0, pero el checo luchó denodadamente hacia el final para quebrar el saque del serbio y ganar su primer game, después de lo cual elevó sus brazos al aire en celebración.
Djokovic ha ganado los 24 partidos que disputó en sus cinco presentaciones en este torneo.
Entre las mujeres, Maria Sharapova se impuso a Petra Kvitova 6-4, 2-6, 6-3 en un encuentro intensamente disputado.
La rusa ganó su cuarto título del año y mantuvo su segundo lugar en el escalafón del mundo.
Sharapova superó diez dobles faltas y unos cuantos errores inoportunos para vencer a su rival en una repetición de la final de Wimbledon 2011, que ganó la zurda Kvitova.
Djokovic dijo que se despertó ayer con una sensación positiva que se mantuvo cuando empezó el partido y quebró el saque de su rival en el primer game.
«Todo se sentía de lo más bien», afirmó. «Entré en la cancha con este sentir positivo».
«Esta ha sido probablemente mi mejor actuación en una final», agregó. «Fue increíble».
Djokovic espera mantener su racha en busca de otro título en el Masters de Shangai la semana próxima, torneo en el que se impuso en 2012 y 2013.
Berdych expresó por su parte que no pudo hacer nada.
«Probablemente he jugado quizás más de 600 partidos en mi carrera en la que enfrenté a tipos como Andre (Agassi), Roger (Federer), todos probablemente en su mejor forma», agregó. «Pero nunca había experimentado nada igual».
Por su parte, a esta altura del año pasado, Sharapova buscaba diferentes opciones de tratamiento para su hombro, sin saber cuándo podría regresar a las canchas.
«Era mentalmente difícil porque estaba en el medio de Europa tratando de hallar una solución mientras todas las demás estaban jugando», añadió. «Decididamente es estupendo estar un año después en una situación que me permite ganar mi cuarto título del año, con un Grand Slam».
Kvitova venía de ganar el fin de semana pasado el Abierto de Wuhan.
«Sí, estaba cansada», dijo. «Pero era la final. Cada vez que juego una final doy todo de mí».
