Davante Adams, de los Packers de Green Bay, deja atrás a Jaylon Johnson, de los Bears de Chicago, en la segunda mitad del juego, en Green Bay, Wisconsin. Foto La Hora: Aaron Gash/AP.

Aaron Rodgers pasó para 341 yardas y cuatro touchdowns y extendió su dominio de la rivalidad más añeja de la NFL, en la victoria de los Packers de Green Bay 45-30 sobre los Bears de Chicago, la noche ayer.

Los Packers anotaron los primeros 24 puntos de la segunda mitad para borrar una desventaja de 27-21 al medio tiempo.

Green Bay (10-3) tomó ventaja de cuatro juegos sobre los Vikings de Minnesota en la cima del Norte de la NFC y dio otro paso rumbo a su tercer título divisional en fila. Chicago (4-9) ha perdido siete de sus últimos nueve encuentros.

Rodgers completó 29 de 37 pases, con dos envíos de anotación a Davante Adams y uno para Allen Lazard y Aaron Jones, respectivamente. Rodgers tiene 61 pases de touchdown en su carrera contra los Bears, la mayor cantidad en la historia ante Chicago y uno más que su predecesor, Brett Favre.

Los Packers tienen registro de 23-5 ante los Bears con Rodgers como titular. Rodgers gritó «¡siguen siendo míos!» a los aficionados en Soldier Field luego de anotar con una escapada en el cuarto periodo en la victoria de 24-14 el pasado 17 de octubre.

Chicago intentó vengarse el domingo y tomó ventaja luego de un frenético segundo cuarto en el que los dos equipos se combinaron para 45 puntos.

Pero los Bears no pudieron mantener el paso.

Por Chicago, Justin Fields completó 18 de 33 envíos para 224 yardas y dos pases de touchdown, pero también tuvo dos intercepciones y perdió un balón. Jakeem Gran anotó dos veces, incluyendo una devolución de despeje de 97 yardas.

Jones anotó un par de touchdowns en un lapso de menos de un minuto para darles a los Packers ventaja definitiva.

Artículo anteriorUEFA reconoce «error» en sorteo de octavos, que volverá a realizarse por completo
Artículo siguienteLa muerte silenciosa, la MM