Al tiempo que los aficionados del Paris Saint-Germain esperan ansiosamente el primer gol del astro argentino Lionel Messi con su nuevo club, de antemano han sido testigos de la capacidad goleadora extraordinario de Achraf Hakimi.
Hakimi es un lateral derecho, pero su definición es digna de un delantero. El marroquí de 22 años dejó eso en claro de nuevo el miércoles por la noche al aportar los dos goles en una apretada victoria de 2-1 en su visita al Metz.
Su gol de último minuto mantuvo viva la racha ganadora del PSG y el club pretende apuntarse su octava victoria en fila en la liga francesa cuando reciba al Montpellier el sábado.
La destreza de Hakimi para avanzar con el balón, driblar y disparar al arco lo han hecho parecer en veces más bien un extremo. Ha anotado tres veces en siete partidos en la liga para el PSG. La temporada pasada, sus siete dianas ayudaron al Inter a arrebatarle el título de la Serie A a la poderosa Juventus.
Aún a(i, causó asombro cuando el PSG pagó 60 millones de euros (70,3 millones de dólares) para sumarlo a sus filas —un precio elevado por un defensor, y más aún por un lateral derecho.
La llegada de Messi procedente del Barcelona fue el punto más destacado de un periodo entre temporadas de enormes tareas de reclutamiento, pero hasta ahora Hakimi parece ser el mejor fichaje del conjunto parisino.
El defensor de la selección de Marruecos es veloz, atlético, elusivo y fuerte. Su nivel de condición física le permite irse al frente y regresar de nuevo a su posición en la defensa.
«Me siento muy contento por él, es un buen chico», afirmó el técnico del PSG, Mauricio Pochettino, sobre Hakimi. «Él aporta mucho al equipo, no solo sus goles sino todo el trabajo que hace por las bandas».
El lateral izquierdo del PSG, Juan Bernat, está cerca de regresar a la alineación después de una ausencia de un año por una lesión seria de rodilla.
Una vez que el español lo haga, el PSG contará con dos de los laterales de ataque más peligrosos del fútbol europeo.
Los clubes franceses esperan que los aficionados se comporten este fin de semana después de tres incidentes violentos que llamaron la atención al inicio de la temporada, y ejercieron presión a la liga para resolver el problema.
Los hinchas del Marsella se liaron a golpes con sus similares del Angers al final del partido del miércoles.
Eso sucedió apenas días después de que seguidores de los rivales Lens y Lille chocaron al medio tiempo en escenas caóticas en que volaron asientos que fueron arrancados de las tribunas.
Tambien hubo incidentes serios en el duelo Niza-Marsella el mes pasado.
También hay dos encuentros este fin de semana bajo alerta de potenciales peleas.
Niza visita Saint-Etienne el sábado; un día después, el segundo lugar Marsella recibe al cuarto Lens en el Estadio Velódromo en un partido entre clubes del sur y norte.