Tom Brady los Buccaneers de Tampa Bay no titubearon.
Abajo por dos puntos y con 1:24 por jugar en el primer partido de la temporada, los campeones defensores del Super Bowl confiaban en que su quarterback de 44 años encontraría la forma de llevarlos a un nuevo triunfo ayer.
Eso es lo que define a Brady, quien lanzó para 379 yardas y cuatro anotaciones en la victoria de 31-29 sobre los Cowboys de Dallas.
Ante un estadio de la NFL lleno por primera vez desde que sobrevino la pandemia, Ryan Succop definió el encuentro mediante un gol de campo de 36 yardas, con dos segundos por disputarse.
Brady dejó la escena lista para ello, con un avance de último minuto en el campo donde los Bucs se convirtieron hace siete meses en el primer equipo en ganar un Super Bowl como locales.
Fue la 49na serie para ganar un partido en el cuarto periodo o en tiempo extra en temporada regular para el tres veces MVP de la NFL. Eso lo coloca en el tercer puesto de la lista histórica, detrás de Peyton Manning (54) y Drew Brees (53), ambos retirados.
«Obviamente hay mucho que limpiar», dijo Brady tras completar 32 de 50 envíos con dos intercepciones.
Los Bucs, que esperan convertirse en el primer equipo bicampeón desde que Brady llevó a los Patriots de Nueva Inglaterra a títulos consecutivos en 2003 y 2004, perdieron cuatro balones.
Para Brady, quien acumula en su currículum siete títulos de la NFL, fue su partido número 300 de inicio en campaña regular, a lo largo de una brillante carrera de 22 años, un récord para un quarterback.
El veterano de 44 años se unió también a Drew como los únicos mariscales de campo que han lanzado para 300 yardas o más en 100 partidos distintos.
Dak Prescott pasó para 403 yardas y tres touchdowns para Dallas en su primer juego desde que sufrió una grave lesión en el tobillo que puso fin a su temporada 2020 luego de apenas cinco partidos. El veterano de seis temporadas no vio acción en la pretemporada después de lastimarse el hombro derecho durante el campo de entrenamiento.