Alfonso Mata

A mediados de enero 2017, una madre en Santa Rosa recibió la devastadora noticia de que su recién nacido sufría de microcefalia, una afección en la que los bebés nacen con cabezas más pequeñas y un desarrollo cerebral anormal. Las pruebas confirmaron que la madre había sido infectada con el virus del Zika durante su embarazo. El Zika, es una enfermedad tropical transmitida por mosquitos que añade nueva pena a las mujeres en todo el mundo y a sus bebés.

El zika no es una enfermedad nueva, se le conoce desde la de 1950, pero en aquellos tiempos, las infecciones se consideraban relativamente leves y geográficamente limitadas a partes de África ecuatorial y Asia. Hasta el 2014 el virus que la produce era un patógeno de baja prioridad.

Su nombre data de 1947, cuando se descubrió en un mono en el bosque de Zika en Uganda. Un año después, se encontró el virus en un mosquito en el mismo lugar, y las muestras de sangre de humanos mostraron anticuerpos contra el Zika, evidencia de que habían sido infectados previamente con el virus. El primer caso humano documentado se identificó en Nigeria en 1968. Los análisis de sangre en las décadas de 1950 y 1960 mostraron que la infección por el virus estaba muy extendida en humanos en África y muchas partes de Asia.

El Zika es un virus transmitido por mosquitos. Pertenece a la misma familia que varios otros virus transmitidos por mosquitos que pueden causar enfermedades humanas, como la fiebre amarilla, el dengue y el chikungunya. No hay ningún tratamiento o vacuna disponible. La mayoría de las personas infectadas con el virus del Zika ni siquiera lo saben ya que el 80% de los casos son asintomáticos. Para quienes muestran síntomas, los signos más comunes de infección son: fiebre, dolor de cabeza, sarpullido y dolores musculares y articulares.

El Zika es considerado un arbovirus, un virus «transmitido por artrópodos», más comúnmente un mosquito llamado Aedes aegypti. Este mosquito vive principalmente en áreas tropicales del mundo, es un mosquito que está bien adaptado para convivir con los humanos y pone huevos en el agua estancada que se puede encontrar en: llantas viejas, baños para pájaros, latas o macetas. Se alimentan casi exclusivamente de humanos y pueden picar de día, por lo que algunas intervenciones para mantener alejados a los mosquitos, como los mosquiteros, no son tan útiles. Existe la preocupación de que otros mosquitos puedan transmitirlo aunque en menor intensidad. La transmisión de persona a persona también es teóricamente posible. Hay dos informes de transmisión del virus del Zika a través del sexo. Un informe involucró a un estadounidense que había contraído Zika en Senegal y desarrolló síntomas a su regreso a Colorado, y cuya esposa desarrolló la infección por Zika después de la exposición. Un segundo caso encontró el virus del Zika en el semen de un hombre en Tahití mucho después de que el virus se había eliminado de la sangre. Sin embargo, incluso si esto es posible, parece ser un modo de transmisión poco común.

El zika por estas tierras americanas, apareció por primera vez en Brasil a mediados de 2015, posiblemente introducido desde la Polinesia Francesa durante el torneo de fútbol de la Copa Mundial de 2014 o de otros eventos deportivos internacionales. Debido a que muchas propagaciones han sido a lugares turísticos, los turistas infectados durante el viaje han regresado a casa, incubando el virus. Así fue como se diagnosticaron casos asociados a viajes en Dinamarca, España, Portugal, Italia y el Reino Unido, se les llama casos de infecciones por Zika importadas.

¿POR QUÉ ES TAN SERIO ESTE BROTE? Primero, los brotes son muy grandes y han infectado a grandes proporciones de la población donde ocurrieron. Debido a que este virus nunca antes se había identificado en esta ubicación geográfica, la población no tiene inmunidad contra él, lo que significa que todos son vulnerables. Segundo en Brasil originalmente se empezaron a reportar un aumento en los informes de microcefalia en bebés. Esto significa que los bebés nacen con una cabeza anormalmente pequeña y problemas con el desarrollo cerebral. Esto se ha relacionado con infecciones por el virus del Zika en la madre durante el embarazo. En algunos países que experimentan brotes han sugerido que las mujeres retrasen el embarazo durante meses o años hasta que el brote ceda, una propuesta difícil en un área donde muchos embarazos no son planeados y el acceso a métodos anticonceptivos es limitado.

En Colombia también se han reportado aumentos en otra afección neurológica, el síndrome de Guillain-Barré , y se cree que se debe a infecciones por el virus del Zika.

¿QUÉ NO SABEMOS SOBRE ZIKA? Mucho. En este momento, parece haber una correlación entre la microcefalia y la infección por Zika, pero no podemos estar 100% seguros de que el Zika la esté causando, o de que realmente haya un aumento en los casos de microcefalia . Si el Zika realmente está causando microcefalia (y / o síndrome de Guillain-Barré), no tenemos idea de cómo lo está haciendo. No tenemos vacunas ni tratamientos para el Zika, aunque el brote ha despertado el interés en desarrollarlos. Por ahora, los esfuerzos de control se concentran en la eliminación de mosquitos y la educación de la población sobre los posibles riesgos de infección.

En la mayoría de las personas dijimos, el zika causa fiebre, sarpullido, dolor en las articulaciones y los músculos y dolor de cabeza y por eso no siempre es fácil de diagnosticar porque los sistemas de salud no cuentan con procedimientos estandarizados de pruebas diagnósticas, ya que estos síntomas son muy similares a otros virus transmitidos por mosquitos, como el dengue y el chikungunya .

Entonces es mas que evidente que todavía hay muchas preguntas, pocas respuestas sobre el zika durante el embarazo. El primer caso en Guatemala de microcefalia positivo para virus Zika se reportó en mayo del 2016. En este mismo año se reportaron un total de 83 microcefalias positivas para el virus. A pesar de la narrativa actual de los medios, en realidad no está claro qué tan común es la microcefalia (u otros defectos de nacimiento) después de la infección por Zika. Y tampoco sabemos si los defectos solo ocurren durante un trimestre en particular o una ventana de desarrollo. No hay evidencia concluyente sobre si una infección leve o aparentemente asintomática podría resultar en defectos de nacimiento. Este último elemento es una información faltante particularmente crítica. Las pautas actuales se basan principalmente en infecciones sintomáticas, pero solo alrededor del 20% de los infectados muestran realmente síntomas. Y finalmente, no sabemos cómo el virus puede estar causando estos defectos.

La presencia del Zika es aterrador y es comprensible que las madres estén preocupadas. Pero con tantas incógnitas, es importante equilibrar la precaución con la perspectiva. Esta es una historia que avanza rápidamente y probablemente no tendremos respuestas sólidas a estas preguntas durante algún tiempo. Mientras tanto, creo que es prudente tomar esto como una posibilidad y crear conciencia sobre el potencial que este virus puede tener en el feto en desarrollo del bebé, para que las mujeres puedan tomar las precauciones. El zika «necesita más investigación» pero lo mejor es que tome las precauciones que señala el Ministerio de Salud.

Alfonso Mata
Médico y cirujano, con estudios de maestría en salud publica en Harvard University y de Nutrición y metabolismo en Instituto Nacional de la Nutrición “Salvador Zubirán” México. Docente en universidad: Mesoamericana, Rafael Landívar y profesor invitado en México y Costa Rica. Asesoría en Salud y Nutrición en: Guatemala, México, El Salvador, Nicaragua, Honduras, Costa Rica. Investigador asociado en INCAP, Instituto Nacional de la Nutrición Salvador Zubiran y CONRED. Autor de varios artículos y publicaciones relacionadas con el tema de salud y nutrición.
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