Foto: Captura de pantalla Netflix/Serie El juego del calamar.

Cinco minutos fueron suficientes para que “SQUID” la criptomoneda inspirada en la exitosa serie de Netflix “El Juego del Calamar”, pasara de estar valorada en US$2,821 a US$0.00, resultando en una estafa que desembolsó alrededor de US$3.3 millones a los creadores, según la plataforma especializada en tecnología Gizmodo.

En cuestión de nueve días los inversores y también fanáticos de la serie ignoraron las advertencias de los expertos sobre una posible estafa conocida como “tirón de alfombra”, donde los desarrolladores venden rápidamente las “bitcoins” cuando se encuentran en un punto alto y se retiran con todas las ganancias agotando el fondo y provocando que esta pierda su valor en cuestión de segundos.

De acuerdo con la compañía de análisis de criptomonedas, CoinMarketCap, varios usuarios que compraron SQUID reportaron que no podían vender sus tokens en las bolsas de criptomonedas, por lo que advirtieron a los compradores a “extremas precauciones”.

 

LAS ADVERTENCIAS

Además, varios analistas alertaron que el sitio web de SQUID presentaba muchos errores ortográficos y tipográficos, una señal poco fiable para los usuarios, también las redes sociales de la criptodivisa como Telegram y Twitter no permitían generar comentarios.

Desde el lanzamiento de SQUID el pasado martes 26 de octubre, la criptomoneda comenzó valorada en 0,01 y en 72 horas creció un 44,100%. Luego en la madrugada del 01 de noviembre cayó un 99.99% bajando a un precio de 0.0007.

Seguido del colapso de SQUID el portal web y las redes sociales desaparecieron. El portal web de CoinMarketCap reportó que un internauta perdió US$5,000 dólares.

Actualmente gobiernos de países de la Unión Europea y Estados Unidos están trabajando para implementar normativas de prevención en el mercado de criptomonedas, ya que estas pueden “ser utilizadas para otros fines ilegales como blanquear dinero o cometer una estafa”.

Según el Consejo General de Abogacía Española, entre las medidas más destacadas, está el obligar a los wallet (monederos virtuales de compraventa de criptomonedas) a colaborar para prevenir fraudes.

“Se han incluido en la lista de sujetos obligados, por lo que estos operadores tendrán que cumplir con las medidas de prevención del fraude vigentes y serán supervisados por las autoridades”.

 

 

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