Apple anunció que ampliará las capacidades del iPhone para aceptar pagos sin contacto, lo que facilitará a los vendedores realizar transacciones denominadas tap-to-pay o Toca para Pagar, sin tener que adquirir hardware adicional.
Esto también le dará a Apple una ventaja competitiva en el creciente mundo de los pagos sin contacto, en el que tanto iPhone como Apple Pay tienen un papel dominante.
Desde que Apple Pay se lanzó en 2014, se ha utilizado al iPhone como medio de pago sin contacto para bienes y servicios, pero los comerciantes debían contar con su propia terminal de punto de venta para aceptar esos pagos.
El precio de estos dispositivos oscila entre los 50 dólares, en el caso de un dispositivo de pago sin contacto que se coloca junto a una caja registradora, y los dispositivos que cuestan cientos de dólares y que permiten a un empleado o al propietario de una tienda aceptar pagos en cualquier lugar de un comercio o restaurante.
La mayoría de las veces, debido a su costo, sólo los grandes comercios disponen de dispositivos móviles para hacer operaciones Toca para Pagar. Los propios empleados de Apple han utilizado un dispositivo fijado a un iPhone para aceptar pagos sin contacto en sus tiendas, por ejemplo.
La nueva función convierte el iPhone en una terminal de pago, sin necesidad de hardware adicional, dijo Apple. La función Toca para Pagar utilizará la tecnología comunicación de campo cercano (NFC, por sus siglas en inglés) ya existente en el iPhone que se emplea para enviar los pagos a una terminal de cobro.
El nuevo sistema estará disponible en los próximos meses para los desarrolladores a través de una actualización del software iOS, con lo que los desarrolladores y las empresas de servicios de pago podrán añadir la función a su software de punto de venta.