Pedro Pablo Marroquín Pérez
pmarroquin@lahora.com.gt
@ppmp82
Las declaraciones del presidente Alejandro Giammattei en la cumbre celebrada en Andorra pintan de cuerpo entero cómo es que funcionan las cosas en Guatemala y cómo es que opera un sistema que prácticamente solo sabe adquirir medicamentos/vacunas bajo la estructura que Gustavo Alejos “perfeccionó” hace más de una década.
Claro que adquirir la vacuna es una tarea complicada para el mundo entero y más cuando “bajo la excusa que la ley no lo permitía” nos dormimos en nuestros laureles y no logramos negociar directamente con algún productor de la misma desde un inicio.
Es una tarea complicada pero no imposible porque si vemos lo que ha pasado en El Salvador y Costa Rica, el argumento de que es “imposible” queda sin efecto. No han logrado inmunizar a toda la población, pero si van un tanto más avanzados que nosotros
La gente debe recordar que el Gobierno logró en el Congreso aprobaciones presupuestarias y pudieron, sin mayor problema, realizar en el 2020 modificaciones a la legislación que fuera necesaria para ir a negociar y adquirir de forma directa las vacunas correspondientes.
Debemos recordar que no fue hasta enero que el pleno aprobó de urgencia nacional la ley relacionada al tema de vacunas y quién olvidará que el Presidente no la sancionó porque andaba ocupado en el Interior en ese tipo de viajes de los que en ocasiones hasta se hace acompañar de gente de la UCN, como Sofia Hernández.
Una cosa es que el Presidente luzca descuidado y no tenga quien le diga que si hay frio, lo conveniente es que se ponga un abrigo, por ejemplo, y otra que quieran esconder sus incapacidades y los vicios del sistema con la excusa que la Ivermectina sustituye por mucho a la vacuna. Ayer mismo le reprendieron y Edwin Asturias expresó que no hay receta gratis, en clara respuesta a lo dicho por quien lo nombró.
Giammattei sigue queriendo dar atol con el dedo y sin duda, la misma receta le querrá ofrecer a Kamala Harris el lunes.
Y así como el Presidente anda viendo a quien se “duerme”, nuestra Fiscal General demuestra que cuando acciona contra el ex presidente Jimmy Morales, saca cosas que sí terminan caminando aunque lo de Morales ya sabemos que encuentra Consuelo en el nido de impunidad del país.
La vez pasada cuando presentó antejuicio contra Morales, también lo hizo contra Nineth Montenegro y resultó que el antejuicio del Presidente se quedó en nada, situación que no fue igual para la ex diputada.
Siempre hemos dicho que rendir cuentas es una obligación de todos los ciudadanos y dejando eso en claro, no deja de llamar la atención algunas cosas. Por ejemplo, el Presidente y Vicepresidente acordaron (sin citar la represión) quitar a Gendri Reyes tras los eventos del 21 de noviembre. Luego Giammattei burló los acuerdos y el Ministerio Público (MP) no movió un dedo en torno a los excesos policiales.
Porras tiene un rol definido en el MP y mientras ella siga peleando su reelección, todo lo que tenga que ver con este Gobierno será tratado por ella con el mismo pétalo de la rosa con el que trató a Morales y eso es un problema para Guatemala, porque la búsqueda de la verdad queda sujeta a un cargo y eso afecta las causas estructurales que nos tienen en una situación complicada como país.
