Walter Juárez Estrada
Guatemala, está sumergida en un estado fallido-anárquico. La corrupción es varios años. De 1954 hasta ahora, con la supuesta primavera “democrática”, presidentes de los poderes del estado de la mano de narcos, han destruido la consciencia de ciudadanos honrados que demandan que el peso de la ley sea implacable. Se elijan jueces probos y honestos para rescatar la confianza en el concierto de las naciones que con razón han pedido que el proceso de elección de magistrados, sea de honradez y honorabilidad.
Los fiscales Stuardo Campos y Juan Carlos Sandoval Alfaro, del Ministerio Público, desbarataron la estructura de corrupción, donde se han visto involucrados un exdecano de Derecho y los rectores de nuestra tricentenaria Universidad de San Carlos; un expresidente del CANG. y personajes ligados al sector justicia. Están sindicados al imputarles hechos que tendrán que ser aclarados en los tribunales; toda persona es inocente dentro de un debido proceso y debe probarse la imputación de un hecho doloso. El beneficio de la duda y la presunción de inocencia es norma regulada en la Constitución. Se sindica a profesionales y magistrados, de haber hecho acercamientos con el operador político Gustavo Alejos, para influir en la designación de los magistrados de las Cortes y otros cuerpos colegiados.
A esos hechos se agrega que la Fiscalía Contra la Corrupción, investiga la falsificación de pruebas Covid-19, que supuestamente fueron alteradas en Guatemala, a un costo de más de 7 millones de quetzales. En el Hospital General San Juan de Dios, se robaron 10 pruebas que, de ser suministradas, podrían causar pérdidas humanas.
Está en proceso la elección de los magistrados de la CC. que deben tomar posesión el l4 de abril. Se han presentado acciones para impugnar el evento y exigido al Congreso, acelere la elección de los Magistrados de la CSJ. y salas de apelaciones. El “pacto de corruptos” del Legislativo con la anuencia de Presidente Giammattei, el evento durara años. El voto es de viva vos y razonado. El pueblo de Guatemala, debe monitorear el proceso para designar a los jueces honrados que cumplan el perfil que dice la Constitución. El rector de la Universidad de San Carlos, Murphy Paíz, y el exrector Stuardo Gálvez, fueron capturados y se les hizo ver el motivo de su aprehensión, asegurando los imputados que su captura es política. Ahora es la oportunidad que todo cambie que Guatemala, se encause en un derrotero diferente para recuperar la fe pérdida. EE.UU. y países cooperantes, han pedido que se elijan a abogados que dignifiquen la confianza del pueblo para evitar un estallido social que podría darse, si se eligen a togados que tienen vinculación política como ha ocurrido en eventos similares.
La elección de los magistrados de la CC. ha alborotado el cotarro. Se han presentado varias impugnaciones al no exigir a los postulantes los requisitos que regula la Constitución. Las acciones deben ser resueltas antes del l4 de abril, fecha que expira el período de 5 años de los actuales magistrados y no suceda la prolongación de funciones como sucede en la CSJ y sala de apelaciones.