Arlena Cifuentes
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Es la tarde del lunes 29 tengo acceso al “informe diario”, otro gran desacierto, que muestra que se realizaron 805 pruebas “al corte”, lo cual se justifica así: “obedece a un retraso en el ingreso de datos de algunos hospitales … por ausentismo del personal”, subrayo “ausentismo”. ¿Qué piensa usted de la distorsión de la información? Esto es una burla y estamos siendo cómplices de lo que estamos permitiendo que suceda.

Es imposible dejar pasar inadvertido por un lado la sarta publicitaria del Presidente los domingos por la noche en las que se ha hecho recurrente tener que soportar su vana gloria olvidando que lo poco que su Gobierno a hecho se concreta en la entrega de alimentos y a la ayuda económica del bono por desempleo que ha sido entregada a un porcentaje de la población y que ha sido posible utilizando los impuestos de los guatemaltecos, de donaciones y de préstamos; es decir, no provienen de la bondad de su corazón. Por otro lado, es imposible dejar pasar el atropello a nuestro pueblo, tiene que considerarnos ignorantes y estúpidos al manifestar reiteradamente, como lo hizo el domingo 28 por la noche “si usted se siente enfermo vaya a los hospitales” sabiendo que están colapsados como consecuencia de su irresponsabilidad.

Preferiría pensar que el gobernante padece de trastornos mentales a aceptar su deliberado cinismo, descaro y desfachatez. Se ríe del pueblo que está viviendo situaciones de penuria, muriendo por su incompetencia.

El mismo domingo, tuvo el atrevimiento de comparar a Guatemala con Ecuador y Chile lo que no dijo fue cuantas pruebas han realizado estos países. Ecuador ha realizado 134,141 pruebas y Chile 840,150 mientras que en Guatemala debido al enorme compromiso de su Gobierno con el pueblo por salvar y proteger vidas se han realizado 31,427. En el fondo lo que subyace es el objetivo deliberado de manipular a la población, considerándonos tontos. Pero… habemos quienes no somos fácilmente manipulables y aquellos que inicialmente decían “amén” están abriendo los ojos.

La llegada de la nueva Ministra generó falsas expectativas en relación a los cambios drásticos que el sistema de salud necesita urgentemente y que se esperaba se realizarían en el menor tiempo posible. Sin embargo, han transcurrido los días y no se perciben; todo lo contrario, debido al incremento de infectados, que no reflejan los informes diarios, los hospitales tanto en el área metropolitana como en el interior del país son insuficientes, sin camas, carentes de personal médico y toda clase de insumos; en algunos casos hay ausencia de agua. Mientras escribo estas líneas circula un video, los médicos del hospital regional de Zacapa manifiestan “es indignante, frustrante” “no hay voluntad de parte del Gobierno”. Cuatro camas en área crítica y un ventilador. Imaginemos la impotencia del personal de salud en este como en todos los casos.

Solamente la noche del sábado hubo catorce fallecidos en el IGSS los cuales seguramente no fueron considerados en los datos de este día como ya es común que suceda. Los médicos deben tomar foto a los fallecidos porque una vez son embolsados las bolsas no pueden ser abiertas para su reconocimiento.

Ni el Dr. Asturias ni la nueva Ministra parecen capaces de direccionar la actual crisis que llora sangre; y, digo direccionar porque con Monroy y su combo esto nunca tuvo dirección alguna ya que el Presidente era el director de orquesta. El Dr. Asturias nos ha llamado la atención indilgándonos la responsabilidad por la crisis sin tener el valor de señalar a los verdaderamente responsables. Cuál es su interpretación de las 805 pruebas realizadas este lunes. Personalmente aún estoy a la espera de que se realicen al menos las cinco mil pruebas propuestas por él o dado su fracaso, talvez sería mejor que considera renunciar.

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