Sandra Xinico Batz

sxinicobatz@gmail.com

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De continuar el plan del gobierno de reactivar el transporte público y los centros
comerciales en los próximos días, lo peor estará por venir. Estas acciones responden a la
lógica de proteger el capital del criollo a costa de la vida de los pueblos. Quedarse en casa
para resguardar la salud debería ser un derecho y no un privilegio como ocurre en
Guatemala, pero contamos con una clase política y empresarial que ha sacado lo peor de
su avaricia, el mejor ejemplo es la luz, que en lugar de bajar en su costo para apoyar a las
familias ha subido la tarifa hasta el doble de lo que normalmente hemos pagado. Nos salió
peor la “ayuda”.

Lo ocurrido con Patzún es otra muestra de la mediocridad con que actúa el Estado y la
institucionalidad, siendo acordonado un mes para que al final el mismo presidente
reconociera y confirmara lo que desde el principio sostuvimos las vecinas y los vecinos de
Patzún, que se precipitaron en declarar como comunitario el primer caso positivo en este
municipio, con tal de proteger los intereses particulares del alcalde del partido oficial, el
señor Guadalupe Cojtí, quien con seguridad ya se ha constituido como uno de los peores
alcaldes de la historia de nuestro pueblo.

Este cordón fue sólo una pantalla; sitiaron todo un pueblo para dejarlo a la deriva, sin
alternativas ni acciones que mitigaran las consecuencias del encierro, que pudieron ser
menos duras y graves, de haber existido voluntad para proteger los derecho de las
personas que necesitarán meses para recuperarse, no sólo económicamente sino también
emocionalmente, pues el prejuicio y los estigmas no han cesado contra la gente de
Patzún, a quienes se les sigue rechazando por considerarlas “contaminadas”. Es en estos
momentos de crisis que comprobamos la capacidad de las funcionarias y los funcionarios
que dirigen la institucionalidad del Estado.

Nueve médicas y médicas han resultado positivo de COVID-19 en el Hospital Nacional de
Chimaltenango. Las denuncias acerca de no contar con equipo adecuado para su
seguridad, se han venido escuchando por semanas, aún así el Ministerio de Salud niega
que sean nueve, restándole importancia a esta situación y poniendo en duda la
credibilidad de la Procuraduría de los Derechos Humanos que ha cumplido con darle
seguimiento e investigar lo que ha estado ocurriendo en el Hospital.

Hace dos días el director del Hospital Temporal de Xela confirmó el mal estado de las
instalaciones donde se ubica este hospital, que presentó goteras y filtraciones de agua
luego de las fuertes lluvias que cayeron en esos días. El director señala como responsable
a la Municipalidad para hacer las reparaciones y la Municipalidad responsabiliza al
hospital. La época de lluvia ya inició; las áreas afectadas son el de encamamiento y
bodega. ¿Aún así se siguen preguntando por qué las personas rehúyen a ser hospitalizadas
en estos lugares?

Más de 38 mil trabajadoras y trabajadores del sector privado han sido suspendidos de sus
labores sin salario.
En todo el país se hondean banderas blancas.

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