Pedro Pablo Marroquín Pérez
pmarroquin@lahora.com.gt
@ppmp82
En una entrevista que publicamos el día domingo en digital y ayer en la versión impresa, el Dr. Edwin Asturias presentó el panorama al que desde su experiencia y conocimiento nos enfrentamos los guatemaltecos en torno a la pandemia del COVID-19.
Explicaba el doctor que estamos en una línea ascendente y que el pico se espera para finales de mayo y primeras semanas de junio y el reto se vuelve enorme porque debemos intentar llegar a esas fecha con la menor cantidad de casos posibles.
En los últimos días hemos visto una mayor cantidad de casos. Tales días han significado vivir los peores momentos de la crisis en función de la cantidad de enfermos pero muchos queríamos más pruebas al día y parte de ese resultado es que íbamos a ser capaces de detectar a más personas padeciendo de la enfermedad.
Preguntado en la entrevista, ¿Qué es lo mejor que se puede hacer para aplanar la curva?, el Dr Asturias contestó:
“Distanciamiento social, pero en Guatemala, por lo menos en los centros urbanos donde las personas usan internet en su celular, Google ha podido comprobar que hemos reducido nuestra movilidad a restaurantes y comercios en un 60% y a supermercados un 35%. El mejor efecto sobre la curva se obtiene cuando ese Distanciamiento y Aislamiento social es mayor de 80%. Por debajo del 40% es como que no se hiciera casi nada.”.
Es cierto que los ciudadanos debemos seguir comiendo y debemos de encontrar maneras de abastecernos, pero lo debemos hacer tomando todos los cuidados del mundo, siendo estrictos con el tema del distanciamiento social, usar la mascarilla y no olvidarnos nunca que no debemos tocarnos los ojos, la nariz o la boca sin habernos lavado las manos con jabón o al menos alcohol en gel.
Siempre he dicho que esta crisis tiene tres componentes, el de la salud, la economía y el tema social. Ahora el reto es evitar brotes que nos manden a la lona y nos lleven a nuestros peores escenarios que son a la vez, nuestras peores pesadillas. Si tomamos las precauciones, podremos acercarnos más a re abrir la economía dentro de la nueva normalidad que regirá nuestra vida hasta que haya vacuna y ser responsables evitando mayor propagación evitará mayores problemas sociales.
Cuidarnos significará, además de abrir la economía, que el Estado pueda centrar recursos operativos para buscar y dar con los pobres y necesitados de este país. La tarea está siendo enorme porque desde los tiempos de Sandrita, se usó el aparato del Estado para dar cobertura social con fines electorales y los listados no se hicieron en función de atacar la pobreza si no con la intención de captar los votos. Esa tónica ha sido una constante y por eso ahora el reto es titánico para atender a los más necesitados.
Costa Rica, en su día 51 (ayer) reportaba 697 casos, 6 fallecidos, 287 recuperados y 12,670 pruebas realizadas desde el 6 de marzo cuando se reportó el primer caso y empezaron a ejecutar la fase I de abrir la economía para analizar cómo se pudiera dar un brote. En medio de sus retos, la ventaja que nos llevan los ticos es que son un país más igualado en el que su gente ha tenido mayor acceso a la educación.
La falta de oportunidades que durante años le hemos asegurado a millones de guatemaltecos, más su retraso en nutrición y poco acceso a la educación, hacen que el reto sea enorme y por eso, insisto, debemos cuidarnos para asegurar que no haya una complicación epidemiológica.
Si cometemos ese error, olvídese porque todo se complica y prolonga: el tema de salud se vuelve aterrador, la economía se golpeará más porque habremos de esperar más tiempo y el tema social se vuelve como un fogarón al que le echarán gasolina.
Por eso, cuidémonos, cuídese y haga lo que haga en su diario vivir, sea responsable por favor y dejemos por un lado los temas personales para ocuparnos del país.
