Oscar Clemente Marroquín

ocmarroq@lahora.gt

28 de diciembre de 1949. Licenciado en Ciencias Jurídicas y Sociales, Periodista y columnista de opinión con más de cincuenta años de ejercicio habiéndome iniciado en La Hora Dominical. Enemigo por herencia de toda forma de dictadura y ahora comprometido para luchar contra la dictadura de la corrupción que empobrece y lastima a los guatemaltecos más necesitados, con el deseo de heredar un país distinto a mis 15 nietos.

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El año pasado realizamos los preparativos para tres eventos muy especiales a los que queríamos asistir este año. Por esta época en el 2019 se graduó de la Universidad de Carolina del Norte la mayor de nuestras nietas, acto muy emotivo al que asistimos orgullosos para acompañar a María Andrea Marroquín Hormaeche en ese momento tan especial tras culminar la primera etapa de sus estudios de Psicología y en este 2020 planificamos viajar el 20 de abril para ir a la graduación de otros dos nietos en universidades norteamericanas y luego volver a la graduación de colegio de otra de esos quince patojos que nos alegran la vida y nos llenan de orgullo.

El domingo 26 de abril teníamos que asistir a la Universidad de Pittsburgh para acompañar al mayor de los nietos varones, Oscar Clemente Marroquín Hormaeche, quien terminaba esa primera etapa de su formación universitaria en Ciencias Políticas y Sociología en la prestigiosa universidad de la ciudad que le vio crecer y a donde llegó junto a sus padres hace ya tantos años. Obviamente la falta de vuelos y las condiciones imperantes tanto aquí como en los Estados Unidos hicieron imposible compartir con su familia en vivo un acto tan importante y ellos, desde su propia casa, siguieron como nosotros desde aquí, la ceremonia de graduación transmitida por el canal YouTube de Pitt University. Queda pendiente para otra fecha, primero Dios, la celebración física y el brindis por los logros.

Seguidamente íbamos a desplazarnos a Harrisburg donde el domingo 9 de mayo se realizaría la graduación de nuestra nieta Daniela María Marroquín Flores, quien termina sus estudios de Ciencia Política en la reconocida Penn State University. El plan era viajar emprender camino ese mismo día a Maryland para celebrar en familia el acontecimiento que se empañó con mucha tristeza porque hace pocas semanas falleció mi querido amigo y consuegro, el doctor Danilo Flores, quien estaba también supuesto a estar allá por estas fechas. Ahora la graduación de Penn State también será virtual pero tienen además planificado trasladar el acto formal para el próximo otoño

Y por último debíamos volver a Guatemala para la graduación de bachiller de nuestra nieta Isabel Pemueller Marroquín, quien termina sus estudios en el Colegio Americano para iniciar también su vida universitaria, acto que por supuesto ya fue también cancelado y que sin duda podremos seguir, como todos los alumnos y sus familiares, virtualmente gracias a la tecnología.

Se trata de tres situaciones importantes, de esas que uno recuerda para toda la vida. Graduarse del colegio y luego de la universidad son parte de los logros que uno empieza a concretar tras mucho esfuerzo y dedicación y para todos los que hemos tenido la suerte de participar en ese tipo de eventos, el recuerdo es imborrable porque en cada una de esas etapas uno siente que alcanzó poco menos que la gloria y que el mundo se le abre para emprender nuevas e incontenibles hazañas.

Esta generación de nuestros nietos está viviendo una experiencia inédita que sin duda dejará huella en sus vidas. Los tenemos en edades que van de los 23 a los 2 años y sin duda que cada quien procesa de manera diferente esa inesperada vivencia que, para los graduandos del año, reviste sentimientos especiales según piensa este abuelo chocho.

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