Walter Juárez Estrada
El Registro de la Propiedad Inmueble, está en el ojo del huracán, al descubrirse el espionaje al nuevo Registrador, Luis Alfredo Pineda Loarca, hombre de confianza del presidente Giammattei. Dirigentes sindicales antes que el funcionario asumiera el cargo, instalaron cámaras ocultas y graban sus escuchas telefónicas, para saber los movimientos del Registrador. Esos hechos no son nuevos en el Estado. En el gobierno de Colom, el secretario de la SAAS Carlos Quintanilla, colocó esos mismos implementos en su despacho, hecho similar detectó la exdiputada Nineth Montenegro, para saber sus movimientos y qué hacía en el Palacio Legislativo.
El espionaje que es blanco Pineda, no queda allí. Se conoce que los dirigentes sindicales lo increparon en vía de “coacción” poniéndolo en antecedentes, diciéndole que “sabían dónde vivía, qué vehículo usaba y que ojalá cuando dejara el puesto siguiera teniendo el mismo perfil, en caso contrario lo denunciarían públicamente… pero que podían ser diferentes con él …si accedía a ciertos requerimientos como mejorarles el salario y no destituir a ningún empleado, como ha sido norma de los nuevos Registradores.
El Registro de la Propiedad en todos los gobiernos ha sido blanco de hechos punibles. En la gestión de Anabella de León, se descubrió que sindicalistas la habían coaccionada para comprar canastas navideñas a previos fuera del mercado, donde se vieron vinculados y procesados un hijo y un hermano del expresidente Morales, absueltos en los Tribunales. No se conoce si el registrador Pineda ya denuncio las acciones de que es objeto por los sindicalistas que por años han tenido ventajas económicas y operadores se ponen de acuerdo con notarios para alterar los registros de los inmuebles, despojándose a sus verdaderos dueños.
También en esa entidad hay otros hechos anómalos. En la dirección de seguridad del gobierno anterior, en ese registro, fue nombrado con un salario de Q20,000 Alex Oswaldo Franco Figueroa, por órdenes del ex registrador adjunto Magbir Mardoqueo Méndez López, secretario de actas del ex partido oficial pasado, que tenía el control del Registro, con Elmer Erasmo Beltetón Morales, primo del ex presidente de igual apellido. Pero Franco, gozaba de una plaza fantasma y se presentaba al Registro los fines de mes para cobrar su salario, con documentos alterados con el beneplácito y autorización de los funcionarios de esa entidad, pues tal sujeto tenía plaza fija de “asesor” del Mingob en la gestión de Degenhart.
Pineda, ex mandatario judicial del presidente Giammattei, ha sido hermético y no se ha pronunciado de las graves anomalías que salen a luz pública en el Registro de la Propiedad, entidad que en el pasado ha sido dirigida por connotados profesionales del derecho que le han dado prestigio al Registro, se espera que el nuevo funcionario haga una limpia total en la entidad que resguarda los bienes inmuebles, pues no es posible que los sindicalistas tengan de las manos “atadas” a las autoridades para sacar ventajas económicas y que los jueces de trabajo diriman los conflictos colectivos con arreglo de derecho y no se dejen manipular por sindicalistas sin escrúpulos.