En el tema del respeto a la Constitución no se puede actuar de manera selectiva y demandar cumplimiento al pie de la letra de una parte e ignorar maliciosamente otras que no nos convienen, sobre todo si esas otras son las que tutelan o protegen los valores más importantes establecidos en la Ley Fundamental de una República. Viene a cuento lo anterior porque estamos frente a un debate respecto a la elección de magistrados de Salas de Apelaciones y de la Corte Suprema de Justicia luego de que ya venció el período de los que hoy ostentan los cargos y se insiste en apresurar la elección para “evitar una ruptura constitucional”, no obstante que el retraso se produjo porque en el proceso de postulación se violentaron los principios esenciales que hablan de la idoneidad y de la capacidad como requisitos esenciales para el desempeño de puestos públicos y porque se vició TODO el proceso por la manipulación realizada por un privado de libertad que no sólo estructuró mayorías en las Comisiones, sino que también lo logró hacer en el mismo Congreso de la República.
Es obvio que Gustavo Alejos tiene interés personal en disponer de Cortes que lo liberen de todos los casos en los que se ha visto involucrado, pero también es obvio que en ese empeño no está solo y que el mucho dinero que ha corrido para ir “arreglando las cosas” no proviene de la propia fortuna que amasó durante tantos años. Son muchos los que están poniendo su grano de arena para ir comprando voluntades, asegurando los resultados, y el avance no es sólo en las postulaciones sino que todo está apalabrado para la elección en el Congreso donde la mayoría oficialista se logró gracias a la intervención del mismo personaje que contó, como lo hemos reiterado, con la colaboración de Sandra Torres, del Partidos TODOS, de la UCN de Mario Estrada y del oficialismo de Giammattei que son la columna vertebral de la alianza parlamentaria.
El valor de la justicia objetiva, pronta y cumplida está plasmado en la Constitución de la República pero no puede alcanzarse si se integran Cortes de la forma en que ha ocurrido en el país y como lo intentó Alejos. Persiguen tener Cortes totalmente alineadas a la impunidad para que todos los que fueron sindicados de corrupción puedan salir tranquilamente de la cárcel cuando sus casos sean sobreseídos por las más altas magistraturas.
Por ello les urge la elección a la carrera y usan el tema constitucional como pretexto para ocultar su sed de impunidad.