Emilio Matta

emiliomattasaravia@gmail.com

Esposo y padre. Licenciado en Administración de Empresas de la Universidad Francisco Marroquín, MBA de la Universidad Adolfo Ibáñez de Chile, Certificado en Métodos de Pronósticos por Florida International University. 24 años de trayectoria profesional en las áreas de Operaciones, Logística y Finanzas en empresas industriales, comerciales y de servicios, empresario y columnista en La Hora.

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Emilio Matta Saravia
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El compromiso es una obligación contraída por una persona que se compromete a algo. En su discurso de toma de posesión el pasado martes, nuestro presidente electo, el doctor Alejandro Giammattei asumió una serie de compromisos que tendrá que cumplir durante su mandato y él debe estar muy consciente de ello.

En su discurso de toma de posesión, que me pareció muy asertivo, el nuevo Presidente hizo un llamado a la unidad nacional y a dejar de un lado los intereses “ideológicos” que nos han polarizado por tanto tiempo para trabajar por Guatemala. Me pareció muy acertado. Luego enumeró algunos de los problemas más importantes que tenemos en Guatemala, como la desnutrición crónica infantil que afecta a 1 de cada 2 niños y que no se combate únicamente con la creación de empleo (además de reconocer que éste ha sido el principal fracaso de Guatemala como nación), la educación, la rampante corrupción a todos los niveles, la violencia proveniente de las maras y pandillas, y la falta de certeza jurídica para proteger las inversiones.

También esbozó soluciones muy generales, a dichos problemas. Me agradó que la erradicación de la desnutrición crónica infantil sea su principal objetivo y que lo haga un compromiso de Estado, además de ser un reto personal para él, al indicar que iniciaría la cruzada nacional por la nutrición, asimismo, anunció la creación del fondo contra el hambre y la desnutrición. También aseveró que su gobierno iba a combatir frontalmente la corrupción, las compras sobrevaloradas y el contrabando, que tanto daño han hecho al país y que son causas de muchísimos de los males que padecemos hoy día como nación. No dejó claro, sin embargo, de qué forma lo va a hacer, únicamente aludió a la creación de una comisión presidencial para atender dicho problema. En cuanto a la educación, hizo énfasis en que es impostergable realizar una reforma educativa y aseguró que una juventud con educación debe ser el cimiento de nuestro país. Habló de combatir la violencia de las pandillas y maras a través de la prevención del delito, dando importancia a una verdadera inclusión social y al acceso a la educación, enseñando a los niños valores, a vivir en comunidad y lo que él llama emprendedurismo. También habló de la protección a la inversión proveyendo certeza jurídica a las inversiones y esbozó la idea de hacer de Guatemala un centro logístico por su posición geográfica.

Todo lo anterior fue a lo que se comprometió el doctor Giammattei en su discurso de toma de posesión del cargo de Presidente de Guatemala. Estos son compromisos muy serios y nuestro Presidente debe tener muy presente que él los está asumiendo, no solo como un funcionario público, sino que, como un mandatario del pueblo de Guatemala. De esa cuenta, considero que una gran parte del éxito de su gestión vendrá no sólo de cumplir con estos compromisos, sino que también de su capacidad para poder estar cerca de la gente, y no rodeado de la rosca que ha mantenido tan cercados a los presidentes que no les ha dejado ver más allá de lo que ellos mismos les han permitido.

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