Por Jorge Santos
Tradicionalmente son los gobiernos nuevos los que hacen ofrecimientos de que en 100 días resolverán problemáticas existentes, sin embargo, dando seguimiento a su forma de actuar, Jimmy Morales, contra toda lógica establece un “plan de 100 días” para culminar su mandato. Imagino que, siguiendo un guion, diseñado por el núcleo de corruptos que le rodea, ha ofrecido lo que él mismo ha denominado el rescate de Guatemala.
Por el momento, el plan de Alianza Criminal que él encabeza, ha iniciado solicitando al Congreso de la República, la ampliación del estado de Sitio por treinta días más en 22 municipios de 6 departamentos, así como la aprobación del estado de Sitio para 2 municipios del departamento de Sololá. Así mismo, la solicitud de destitución del Procurador de Derechos Humanos. Ambas iniciativas constituyen el mejor ejemplo del retroceso al cual estamos siendo sometidos.
Este plan macabro cuenta con la aprobación de la elite económica, particularmente la que se aglutina en las cámaras empresariales, quienes parecieran estar detrás del diseño y posible financiamiento del mismo. Otro actor que resalta estar detrás de este plan, el otro grupo compuesto por militares que desde la conformación de FCN Nación y luego junto a Jimmy, han ido ganando terreno. La regresión democrática y de derechos humanos, materializada en estos últimos 100 días de gobierno de Morales, pareciera contar con la lógica establecida en los Planes Contrainsurgente elaborados en el marco del Conflicto Armado Interno. Esta lógica establece tres fases consecutivas a desarrollarse, la primera de ellas la planificación, la segunda y actualmente en vigencia conocida como ejecución y tercera y última la consolidación.
A lo que estamos asistiendo fue planificado durante el 2017 cuando se consolidó la articulación de las mafias, conocida como la Alianza Criminal y la ejecución se fue dando, con la declaratoria de Non Grato al Comisionado de la CICIG, los dos decretos pro impunidad de septiembre. Al iniciar 2018 dichas mafias, anquilosadas en la institucionalidad pública, toman la Junta Directiva del Congreso de la República y con ello se construyen muchas de las iniciativas de Ley que hoy pretenden dar legitimidad a lo que el Ejecutivo realiza de facto. Luego vendrá la no ampliación del mandato de la CICIG, la cooptación del Ministerio Público, el Ministerio de Gobernación, y con ello el avance de lo que significará la pérdida de dos actores claves para la investigación y persecución penal.
Así que ahora estamos en un escenario complejo, donde el presidente Morales y la Alianza Criminal están en plena ejecución, que terminará de ampliar el retroceso y de instalar nuevamente un régimen de violencia, corrupción, impunidad y pobreza. Ya veremos si Giammattei será el encargado de llegar a consolidar lo hoy actuado por Morales. La tarea es por lo tanto la articulación, tejer una vasta alianza social y popular que no dé paso a la tolerancia, aún y cuando le queden al dictadorzuelo de Morales 100 días, será capaz de desaforarlo.