Edith González
“La muerte es dulce; pero su antesala, cruel.”
(Camilo José Cela)
Diariamente, a cada hora, se tiene conocimiento por los medios radiales, de televisión o redes sociales, sobre la muerte de motoristas, en carretera, y en calles de las ciudades. Yo diría que en la última década se incrementó el uso de este vehículo para el desplazamiento de miles de guatemaltecos, a sus zonas de trabajo, a sus hogares o a sus sitios de entretenimiento.
Pero… ¿por qué mueren tantos guatemaltecos que utilizan este medio de locomoción…? La primera respuesta que uno encuentra en los informes de los cuerpos de bomberos, de la policía o del Ministerio Público es por la irresponsabilidad del conductor de este vehículo de dos ruedas.
Resulta ya cotidiano, ver tres en moto, un padre que maneja, el niño pequeño, la madre, que como si no fuera suficiente, con una mano lleva una caja, una bolsa o cualquier objeto y con la otra detiene el pequeño. A esto sume, el exceso de velocidad, la irrupción en carriles, no marcados por supuesto, el zigzag en las calles y avenidas, velocidades no permitidas, desconocimiento de las rutas, ningún control al entrar en las curvas, sin prevención tras las lluvias, con asfalto mojado.
Un 49 por ciento de los lesionados en accidentes de motocicletas proviene de hechos ocurridos en el departamento de Guatemala; un 30 por ciento de los fallecidos en motocicletas se registran en dicho departamento.
La siniestralidad vial de motos es de 2 mil 723, fallecidos 483 y lesionados 2 mil 795. Estudio realizado en la Calzada San Juan y 11 calle, de la zona 7, Calzada Roosevelt y 7 avenida, zona 3, Calzada Raúl Aguilar Batres y 34 calle, zona 12, Bulevar Los Próceres y 18 calle, zona 10 y Carretera al Atlántico y 11 avenida, zona 18. En todos estos casos, es el conductor de la motocicleta el responsable. Los conductores de vehículos de cuatro ruedas llegan apenas a un 7% de responsabilidad directa.
Aunque en el primer semestre del 2017 por primera vez en los últimos años disminuyeron los motociclistas fallecidos y lesionados, su alto número de siniestros fatales siguieron a la orden del día.
Un informe preliminar del Observatorio de la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) de Colombia estableció que entre enero y junio del presente año murieron 1 mil 470 conductores de motos (un promedio de 8 diarios), frente a 1 mil 631 en igual período del 2016, es decir, bajó en un 9,9 por ciento el registro, con 161 víctimas mortales menos. Pese a que Colombia es uno de los países con más muertes por accidentes de motocicletas muestra en el presente año una diminución importante por el esfuerzo por reducir este flagelo.
Guatemala trató de ordenar a los motociclistas en las calles y avenidas urbanas, pidió el uso del chaleco anaranjado, y el casco pero… nada sucedió al final.
Formulo un llamado a las autoridades para buscar soluciones a estas dolorosas muertes, sobre todo, a quienes manejan motocicletas.
De su responsabilidad depende su vida y la de otras personas.