Roberto Arias
Revisando el material de mi estudio en FLACSO, retomé que la Tierra es un ser vivo, de acuerdo a la teoría Gaia de James Lovelock que define a Gaia como «…Una entidad compleja que implica la biosfera de la Tierra, la atmósfera, los océanos y el suelo. La totalidad constituyendo un sistema de retroalimentación o cibernético que busca un entorno físico y químico óptimo para la vida en este planeta». Conviene recordar a los amables lectores que la fisiología es la Ciencia que tiene por objeto el estudio de las funciones de los seres orgánicos.
La Tierra fue creada en el lugar adecuado para su subsistencia. Su ubicación dentro de la Vía Láctea (que es su galaxia) y de su sistema solar es perfecto para la sustentación de su sistema biótico, incluyendo a la malagradecida y estúpidamente voraz humanidad. Si la Tierra estuviera situada en cualquier otro sitio del espacio sideral o de la misma galaxia, lo más seguro es que no habría vida en ella, menos aún como la conocemos. Únicamente pensemos que sin la Luna girando alrededor de la tierra a la velocidad y distancia perfectas, aquí no habría vida.
La Tierra es el tercer planeta del sistema solar y, a su vez se compone de varios subsistemas que interaccionan entre sí: La Atmósfera; la Biosfera; la Hidrosfera y la Geosfera. 1. El sistema Biosfera lo componen los seres vivos del planeta y es responsable de los sistemas biológicos de la Tierra. 2. El sistema Atmósfera lo compone la envoltura de gases del planeta y es responsable de los climas y de los vientos de la Tierra. 3. El sistema Hidrosfera lo compone el agua del planeta (ríos, lagos, mares y océanos) y hielos (Criosfera) de la Tierra. También responsable de los climas y de la formación de nubes y de las precipitaciones, es decir, del Ciclo del agua. 4. El sistema Geosfera lo componen los continentes, rocas y minerales del planeta y, es responsable de los fenómenos geológicos externos e internos: La formación de relieves de la superficie de la Tierra.
El Colegio Santo Domingo de Guzmán nos explica que la temperatura de la Tierra aumenta gradualmente con la profundidad de modo que en el interior terrestre existen temperaturas muy altas (hasta 6000ºC). El origen de este calor interno está en la energía liberada al formarse la Tierra y sobre todo en la energía liberada por los elementos radioactivos.
La corteza y una parte del manto terrestres forman una capa sólida y rígida llamada litosfera que se sitúa sobre una capa blanda y plástica de materiales parcialmente fundidos llamada astenosfera. La energía interna hace que esta capa fluida se mueva y desplace a la litosfera que se fragmenta y divide en una serie de bloques llamados placas litosféricas. Los movimientos de estas placas provocarán terremotos, volcanes, el desplazamiento de los continentes y la formación de cordilleras. La consecuencia de toda esta dinámica generada por la energía interna es la creación de relieves.
La intención es recordar a los distinguidos lectores de La Hora, que la Tierra es un ser vivo agredido con una estupidez satánica.