Jesús Alvizures
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En el ruedo nacional se comenta la barrabasada de la fiscal general Consuelo Porras quien dijo que los 60 empleados de CICIG, guatemaltecos capacitados y enterados de los juicios que estuvieron a su cargo, no son los que ingresarán a la unidad de apoyo a la FECI, Fiscalía específica contra la corrupción a cargo del Fiscal de alta honorabilidad JUAN FRANCISCO SANDOVAL. Estos serán apañadores de la corrupción y electos por el oscurantismo corrupto. Es falso que vayan a combatir estos delitos; el MP se sabe que está dando vía libre a la despenalización de quienes tienen juicios abiertos. Al juez fácil le es dar libertad por falta de pruebas que el MP no presenta; pero como este Ministerio se ha caracterizado por estar vigilante y nada se opera; porque nada ven, nada oyen.
Cuantas acciones de persecución penal se han quedado dentro de las paredes blindadas de este engranaje importante de la Ley que anda apegado a no pronunciarse de oficio sobre los transgresores con conocimiento de causa; ha habido quienes violentan con sus malas acciones de desobediencia el Sistema Judicial debilitado por malas prácticas; cooptación de voluntades, esto se sabe y se ha venido operando desde hace muchos años en distintos gobiernos. Y cuando apareció la luz del Ente Internacional CICIG con el comisionado Iván Velásquez y la indiscutible Thelma Aldana en el MP hubo persecución y detención de los corruptos de turno en el poder; más ambos recibieron acusaciones indignantes del gobierno de Jimmy Morales por el trabajo que ejecutaron y está a la vista de todos los guatemaltecos que también se manifestaron.
Ahora está el tema que no quieren vomitar los puntos del Acuerdo firmado de Tercer País Seguro; con Estados Unidos; este que ha venido proliferando sanciones para el país que a todo le dice si TATIT; y con mucha razón porque buscan el apoyo incondicionado para cuando abandonen el poder; ya no habrá CICIG ni MP que les persiga, se gozará de impunidad. Esa es la realidad de nuestra Guatemala donde hasta el Presidente ha dicho en entrevistas que aquí la corrupción es normal. Buenas palabras para recordarle. Y más aún cuando han tratado de amordazar la libre emisión del pensamiento. Artículo 35 de la Constitución de la República.
La Ley debe ser pareja y de credibilidad; y si hay indicio de delito investigarlo; no capturar y después investigar; todos los ciudadanos deben ser respetados dentro de este contexto del poder Judicial. Ahora cuando alguien es acusado de corrupción ya existen pruebas; pero se retiene el juicio con amparos y recusaciones de abogados pisteros; y de ello se desprende que las condenas caen a los años. Pero no es porque no hayan pruebas es la mañosería de los DEFENSORES. Hay muchas experiencias fundamentales documentadas para decir lo que se está diciendo; sin prejuicio de que no sea la verdad; porque la verdad es la que hace libres a los ciudadanos y las naciones del convulsionado mundo.