Marco Trejo
La percepción que tenemos y la pregunta que está en el ambiente es: ¿Será que han subido las estadísticas de accidentes en motocicletas? Es una pregunta que muchos nos hacemos y la realidad es que los índices de este año señalan que es cierta la percepción y la respuesta es que se han incrementado, en un 25 por ciento, los accidentes en motos.
La motocicleta es un medio de transporte muy versátil y eso ha provocado que muchos pilotos abusen de ese factor y si a eso le aunamos que no se respeta la Ley de Tránsito y se hace un segundo, cuarto y sexto carril se torna en una situación muy difícil de manejar en las diferentes carreteras, calles y avenidas de la capital.
Ahora es pan de cada día escuchar, en las noticias, que un camión arrolla motocicleta o bien dos motoristas mueren en accidente de tránsito en determinada carretera. Todos los días, cuando salimos a trabajar, hacer alguna diligencia o bien de paseo podemos ver cómo somos imprudentemente rebasados por motocicletas.
Los motoristas no tienen la más mínima medida de seguridad, para pasar entre dos vehículos, y lo irrisorio de todo es que ahora los que manejamos carro y respetamos el carril que corresponde somos maltratados, bocinados e incluso nos pasan pateando el carro, porque los motoristas van a pasar incumpliendo totalmente las leyes viales vigentes.
He trabajado como comunicador en el tema de la educación vial, sé que las empresas distribuidoras de motocicletas hacen todo su esfuerzo, por hacer conciencia del peligro que conlleva el irrespeto de las normas de manejo, pero aun así los motoristas hacen caso omiso de las sugerencias que se les dan, lo cual es una clara muestra, de que los guatemaltecos carecemos de educación y de lógica en muchos aspectos de la vida.
Hace unos días el Superintendente de la Municipalidad de Guatemala, Amílcar Montejo subió a su red social el caso de una Policía Municipal de Tránsito (PMT), quien le marcó alto a un motorista, para indicarle que se pusiera el casco que llevaba colgado en el brazo. En ese instante pasó por mi mente un pensamiento y me dije: esta persona no se quiere, por más que se les diga, lo que significa el dispositivo protector, no se quieren y no se ponen a pensar que en su casa hay familia que lo espera y que lo necesita porque aún tiene hijos pequeños.
Durante el 2018 las cifras de accidentes de tránsito, en el país, fueron de más de seis mil percances viales, incluyendo motocicletas, de los cuales más de 2 mil 600 se convierten en decesos, de estos números, más del 30 por ciento son de pilotos o acompañantes en motocicleta.
Lo perjudicial en este tipo de temas es que cuando ocurre un accidente vial donde se ve involucrado un motorista y un conductor de carro, mientras se averigua qué fue lo que sucedió, uno queda herido en el hospital y otro vinculado a un proceso judicial, en el mejor de los casos. La mayoría de veces los pilotos de autos tienen que correr con los gastos médicos y hospitalarios, porque la desventaja la lleva el que viaja en dos ruedas.
Muchos de estos accidentes, 6 mil accidentes, son provocados por la mala conducción de los que viajan en motocicletas, se pasan de un carril al otro sin hacer ni siquiera una señal o bien poner un pidevías, pero lo más usual es que hacen segundo, cuarto y sexto carril en arterias de dos carriles. Ahora rebasan por el lado derecho y eso también contraviene las regulaciones.
Los accidentes de tránsito han dejado, en las estadísticas, la segunda causa de muerte en el país, por lo que hay que hacer algo y los diputados al Congreso de la República tienen, en sus manos, hacer algo por cambiar un poco las cosas desordenadas en el país, en vez de estar tratando de mantener el statu quo.