Raymond J. Wennier
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El Ministerio de Educación es el más grande en cuanto a tener, alrededor de ciento cincuenta mil colaboradores; la gran mayoría, maestros de primaria. Recibe, del presupuesto de la Nación, la mayor partida de dinero para cubrir todos los gastos calculados en su presupuesto.
Aun así, el Mineduc adolece de muchas cosas materiales y recursos humanos. A la vez, hay mucho que no se hace, aduciendo una serie de razones que pueden ser cuestionables.
Una opinión escuchada frecuentemente es que la calidad de la educación no está al nivel esperado. Eso afecta la esperanza y esto tiene efectos graves en el proceso educativo de los alumnos. Me pregunto si las “aulas del futuro” cubren amplias áreas del país o sólo la Capital. Otra, es la diferencia entre medición y evaluación del rendimiento de los alumnos. ¿Será que una debe dominar a otra?
Tal vez el elemento más importante en todo el proceso enseñanza/aprendizaje, es el recurso humano, los maestros. ¿Cómo sigue el programa de capacitación para ellos? ¿Cuántos maestros del área rural tienen la oportunidad de este beneficio? Recordemos, hay miles de maestros en las aulas.
¿Funciona correctamente la administración central y distrital para atender las necesidades de cada área de competencia? La Ley de Educación es muy clara en cómo debe procederse en su aplicación. ¿Conocen, quienes deben conocerla, la Ley y su reglamento?
La infraestructura de escuelas, cientos de ellas, están en situaciones precarias. ¿Qué se hace para repararlas? Es interesante preguntar cómo la educación inicial va a atender a los bebés e infantes. Es su responsabilidad. Y al otro extremo, cómo se atienden los niveles de básico y diversificado.
SÍ SEÑORES CANDIDATOS A LA PRESIDENCIA, DOCTOR GIAMMATTEI Y LICENCIADA TORRES, A USTEDES LES HABLO. He escuchado muchas de sus promesas que imagino son compromisos que va a cumplir, de salir triunfador, uno de ustedes.
Una promesa es dar una esperanza a la población de que sí va a haber cambios para mejorar las diferentes situaciones precarias en que vive y aguanta la mayoría de la población. Es necesario el COMPROMISO de realizar esas promesas escuchadas y leídas en una larga lista. No cumplirlo es mentir y engañar, es inmoral prometer lo que se sabe no se puede cumplir. Les pregunto: ¿Qué equipo va a ejecutar las promesas y con qué presupuesto cuentan?
Al inicio de este artículo, les hablo directamente sobre el Mineduc y su gran cantidad de necesidades; no he escuchado de ustedes, acciones específicas, factibles, ya planificadas, de cómo van a resolver lo planteado y lo mucho más por destapar.
Para decidir por quién de ustedes votar, es urgente que nos den más puntos de comparación. El ganador debe ya tener seleccionado a su Ministro de Educación quien debe presentarles un plan específico de cómo va a atender ese ministerio y responder a lo planteado. Dicho plan debe ser uno que tenga una visión de transformar el Mineduc, las acciones concretas para que rinda, con TRANSPARENCIA y ÉTICA, los resultados que beneficien a la niñez y juventud guatemaltecas.
SEÑORES GIAMMATTEI Y TORRES, ESPERAMOS SU RESPUESTA.
