Juan Antonio Mazariegos G.
En aproximadamente 4 horas, partiendo desde la Ciudad de Cobán y conduciendo por la denominada Franja Transversal del Norte, el visitante podrá encontrar el Parque Nacional Laguna de Lachuá. A partir del lugar hasta donde pueden llegar los vehículos, 4 kilómetros a pie distancian el punto del cuerpo de agua que es un verdadero atractivo para turistas nacionales y extranjeros; y que da nombre al parque nacional que con una extensión de 145 kilómetros cuadrados se convierte en un refugio para la fauna y la flora de una región donde cada vez más se destruye el hábitat natural de distintas especies.
En días recientes, autoridades del Instituto Nacional de Bosques (Inab), de la Gobernación Departamental de Alta Verapaz y otras han denunciado la existencia de hasta 7 grupos distintos de invasores que destruyen los bosques del Parque Nacional Laguna de Lachuá. Los denunciantes han indicado que, aprovechando la necesidad de la gente, grupos organizados “venden” las tierras del Estado a las familias necesitadas que proceden inmediatamente a quemar la selva del parque y a instalarse en el mismo con la lógica consecuencia de la destrucción del lugar.
Lo más preocupante de las denuncias públicas realizadas es que se ha mencionado en las mismas que existen indicios de que algunos funcionarios podrían estar detrás de las invasiones y que no existe hasta el momento ningún plan o acción por parte de las instituciones del Estado para hacer valer la ley y desalojar a las personas que están destruyendo el patrimonio de todos.
El Ministerio Público se encuentra facultado por ley para intervenir al tener conocimiento de una denuncia como las que se han realizado, de igual manera la Policía Nacional Civil tiene la obligación de proteger y salvaguardar los recursos y los bienes del Estado mediante una actuación preventiva evitando la instalación de estos grupos de invasores que una vez ubicados será sumamente difícil que abandonen el lugar si no es mediante una orden judicial de desalojo.
Para cualquiera que conozca de temas de invasiones e irrespeto a la propiedad privada no será una noticia nueva que grupos organizados se presten para engañar a las personas o que busquen la desestabilización del orden público en distintas regiones del país. El principal problema es que el Estado luce incapaz de hacer cumplir la ley y deja en el desamparo a la ciudadanía, mostrando debilidad y permitiendo que cada vez más, otros poderes controlen amplios espacios de nuestro territorio. Es urgente que los mecanismos del Estado se pongan en funcionamiento para preservar lo que aún nos queda de naturaleza, nadie duda de la necesidad de la gente, allí también falla el Estado, pero acabando con nuestros recursos naturales nadie gana, todos perdemos.