Juan Antonio Mazariegos G.
De conformidad a las últimas encuestas sobre intención de voto, publicadas por la Fundación Libertad y Desarrollo y la realizada por el matutino Prensa Libre, más del 45% de los 8 millones de guatemaltecos inscritos en el padrón electoral, aún se encuentran indecisos sobre en favor de quién emitirán su voto para la Presidencia de la República en las elecciones generales convocadas para este domingo 16 de junio.
Si consideramos que la candidata que aglutina la mayor cantidad de intención de voto, según las mismas encuestas, Sandra Torres de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE) y Alejandro Giammattei de VAMOS, en una segunda posición, alcanzan una intención de voto de alrededor de 20 y 10 por ciento respectivamente, nos encontramos ante un escenario en donde podemos anticipar, casi con total certeza, una segunda vuelta electoral, pero donde además, salvo quien encabeza las encuestas, ningún otro candidato tiene garantizado su acceso a esa segunda vuelta electoral, alcanzando una segunda posición en la votación de este domingo.
Si al análisis anterior agregamos el hecho de que las mismas encuestas señalan que los votos en blanco o nulos alcanzarán alrededor del 15% en conjunto de la votación que se realice y el estrecho margen que separa a los candidatos que ocupan del segundo al quinto puesto en las encuestas, nos encontraremos que una decisión final del votante, al momento de emitir su sufragio, puede inclinar la balanza en favor de uno u otro candidato y resulta que no hay nada definido en esta elección para la Presidencia de la República.
Las encuestas en Guatemala no viven su mejor momento de credibilidad y esto obedece a un sinnúmero de supuestos ejercicios de intención de voto que han circulado, sin duda sesgados por intereses de quienes los han publicado que han tenido como propósito confundir al electorado y posicionar a uno u otro candidato como el seguro segundo lugar y futuro Presidente, dada la casi unanimidad de opiniones que indican que Sandra Torres perdería una segunda vuelta electoral, prácticamente contra quien se enfrente.
Sin duda no hay mejor encuesta que la misma votación y será este domingo por la noche cuando sepamos qué destino espera a Guatemala de cara al resultado que arrojen las urnas. No obstante, considero que hay mucho en juego como para que nos demos el lujo de no acudir a votar y expresar de esa forma qué deseamos para nuestro país. Dentro de los candidatos que hoy ocupan de la segunda a la quinta posición en las encuestas, hay de las más variadas tendencias e incluso algunos que pueden resultar nefastos para nuestro país. No dejemos que otros decidan por nosotros, meditemos nuestro voto y ejerzamos el derecho de elegir, nada está definido aún.