Al ser preguntada sobre si la corrupción podría ser causa de la migración, la flamante Canciller Sandra Jovel dijo: “No entendería en qué términos, yo pensaría más que es la reunificación familiar, la búsqueda de trabajo eso es lo que busca la población”, declaración que no sorprende porque al menos admitió que esta fuera de sus alcances entender cómo la corrupción impacta en una población que sufre por ausencia de desarrollo provocado por un Estado ineficiente que ha sido secuestrado por los corruptos para hacer negocios, dejando por un lado las obligaciones esenciales de promover el bien común y la justicia.

Pero con ejemplos tal vez entendería. Si no viviéramos bajo el imperio de los corruptos pactos colectivos en Educación y Salud nuestra población tendría mejores servicios, lo que impactaría en su calidad de vida pero resulta que la educación es un desastre porque en vez de que el Estado se preocupe por la dignificación de un magisterio eficiente, lo suscribe para tener una fuerza de choque al servicio de las autoridades de turno. Por ello ha sido comparsa de todos los gobiernos corruptos que hemos tenido sin nunca asumir una postura digna, tipo la de María Chinchilla, en contra de los abusos de poder.

Y no tenemos adecuado sistema de Salud porque se roba en el ministerio respectivo desde hace décadas y los pactos colectivos se firman para sobornar a los trabajadores a fin de que no denuncien los grandes negocios que se hacen, no sólo con la compra de medicamentos, negocio fundamental de los ministros y que salpica a los presidentes, sino en todo lo que tiene que ver con compras y contrataciones de la cartera que es una de las más podridas.

No se puede combatir la criminalidad si para avanzar en la destrucción de la CICIG y la lucha contra la corrupción, el Ministerio de Gobernación quedó en manos de alguien que llegó a desmantelar todos los avances que se habían tenido en la Policía Nacional Civil y el narcotráfico opera como amo y señor de regiones enteras, lo que se trata de ocultar con uno que otro decomiso que sirve para tapar el ojo al macho porque la verdad es que el control del narco es absoluto en muchas regiones donde cuenta con el respaldo y la protección tanto de la policía como del mismo Ejército.

Con un Congreso concentrado en los trinquetes no se puede esperar ninguna Ley de interés general que beneficie a la población porque todo gira alrededor de las champurradas. En fin, lo que darían dos dedos de frente.

Redacción La Hora

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