Cartas del Lector

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Lic. Arnoldo Borrayo

En la encuesta publicada por Prensa Libre el 4 de abril recién pasado, se evidencia la existencia de indicadores que generan un alto índice de indiferencia y pesimismo de la población hacia los resultados del próximo evento electoral. Analistas y expertos, entre los que sobresalen politólogos, sociólogos y juristas, coinciden en la causa de fondo: la búsqueda que hacen los políticos corruptos que, con el apoyo de élites económicas y el narcotráfico, tratan de ocupar puestos de poder a través de las mal llamadas elecciones democráticas, para cooptar el Estado y ejercer una cleptocracia, con el fin de satisfacer cualquier tipo de necesidades, menos las que afronta la sociedad guatemalteca. Los resultados, de investigaciones de las anteriores autoridades del MP con el apoyo de la CICIG y ahora de la DEA, confirman y aumentan las posibilidades que las próximas autoridades de los tres poderes del Estado sigan en el mismo tren. ¿Vale entonces la pena otorgar el voto para alguno de los candidatos, diputados y alcaldes? Usted ciudadano, tiene cuatro opciones ante el evento electoral: a) Darle su voto a un candidato o partido; b) Dejar en blanco las boletas; c) Abstenerse de votar; y d) Votar nulo. Estimo que esta última me parece ser la mejor decisión… veamos los porqués:
a) Porque al inclinarse por la primera opción –Votar por cualquier candidato–, es caer en la trampa estratégicamente estructurada por el Pacto de Corruptos: se han puesto de acuerdo para permitir la inscripción en el TSE solamente personajes afines a su causa; que tengan la intención de obtener impunidad por antecedentes de corrupción o que sean tan ingenuos, ignorantes y faltos de carácter, para manejarlos como corderitos. Por otro lado, han pactado obstaculizar movimientos políticos que aspiran al poder público, porque perciben que atentan contra sus intereses. En este contexto, cualquiera de los candidatos que obtenga la victoria, es garantía de continuidad de la impunidad y corrupción; además, se percibe un escenario de alta peligrosidad para la institucionalidad, democracia y desarrollo, ya que se vislumbra, según las tendencias de intención del voto, la llegada al poder de una candidata que ha demostrado históricamente comportamientos propios de una dictadura estilo Venezuela y Nicaragua. Su estrategia es retorcer el sistema legal para que le favorezca en el logro de sus fines, además de ejercer un estilo autocrático, rechazando el diálogo, la crítica y sugerencias.
b) Porque la segunda opción –votar en blanco–, no representa ninguna amenaza a los intereses de mantener cooptado el Estado; el TSE, por ley, ignora este tipo de voto. Solo considera los sufragios válidos. En otras palabras, el sufragio en blanco significa una decisión que indirectamente favorece al Pacto de Corruptos, ya que no contribuye a evitar los esfuerzos de estos por continuar en el poder público.
c) Porque Ia tercera opción –la abstención de votar–, lanza un metamensaje de indiferencia y conformismo. Indirectamente, los votantes manifiestan su frustración, y tratan de equilibrar su disonancia cognoscitiva recurriendo a la excusa que es inevitable el cambio. Según la ley, la decisión de nombrar nuevas autoridades se fundamenta en la totalidad de los votos válidos, aunque estos sean una mínima parte del padrón electoral. En consecuencia, esta opción no representa ninguna amenaza al Pacto de Corruptos.
d) Ante el panorama expuesto, el VOTO NULO es la mejor opción, en virtud de su validez legal e impacto en los resultados. Es cierto que los candidatos serían los mismos y que sería muy difícil lograr que el monto total sea el 50% o mayor del número total de sufragios válidos. Sin embargo, dada la oferta política condicionada y el alto riesgo de que se apodere una tenebrosa dictadura, vale la pena que nos unamos todos los guatemaltecos para que triunfe el voto nulo. Reflexione sobre las siguientes ventajas:

● Los resultados de las votaciones se convertirían en una VERDADERA ENCUESTA para conocer la preferencia del electorado sobre el abanico de candidatos; a la vez, estos conocerían sus posibilidades de triunfo al repetirse las elecciones.
● En consecuencia, existirían altas probabilidades que muchos de ellos se retirarían de la contienda.
● La fecha fatídica de la decisión, 16 de junio, se prolongaría por 4 meses (octubre), lo que le daría al electorado más tiempo para conocer y reflexionar sobre la oferta y, a la vez, los contendientes contarían con más tiempo para darse a conocer en foros y entrevistas.
● Altas probabilidades de conocer los resultados finales de los procesos legales que enfrentan algunos candidatos (Caso Thelma Aldana).
● Si el candidato puntero no obtiene la mayoría absoluta, solo tendremo s dos alternativas y el riesgo de cometer el mismo error de las elecciones pasadas en la segunda vuelta. En cambio, existirían más candidatos en contienda al repetirse los comicios por el triunfo del voto nulo;
● Los candidatos que se escudan en el antejuicio, lo perderían hasta que el TSE se los otorgue en una nueva reinscripción. Un lapso atractivo donde pueden ocurrir acciones interesantes que cambien el panorama político. Atrévase… no se dé por vencido (a)… VOTE NULO y demostremos que se pueden lograr milagros.

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