Oscar Clemente Marroquín
ocmarroq@lahora.com.gt
Con razón Norma Torres se ha convertido en uno de los blancos preferidos de los que manejan decenas de perfiles falsos en las redes sociales, puesto que sus puntos de vista son absolutamente certeros en el tema de la corrupción y porque sus iniciativas para evidenciar a los corruptos se han abierto paso en el Congreso de los Estados Unidos. Ayer, como integrante del poderoso Comité de Asignaciones de la Cámara de Representantes, tuvo un interesante intercambio con el Secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, con relación al listado que presentó el Departamento de Estado sobre los corruptos de Guatemala en seguimiento a la ley que ella propuso para dejar en evidencia a los que se enriquecen y benefician con recursos públicos.
La congresista se quejó del flaco producto del Departamento de Estado que hizo una listita para salir del paso y le dijo al Secretario del Tesoro que uno de los temas más preocupantes para el gobierno del presidente Trump es el de la migración, pero que poco o nada ayuda el que sean complacientes con aquellos que han prostituido a los países del llamado Triángulo Norte de Centroamérica. En su alocución afirmó “La razón por la cual la gente está huyendo es porque no hay acceso a la justicia y los gobiernos se roban los fondos que deben estar disponibles para crear programas de educación. Odio seguir devastando otros presupuestos que se necesitan críticamente en nuestras comunidades para financiar el muro, cuando la respuesta está ahí frente a nosotros y es lidiar con la gente corrupta que no debería tener una visa ni acceso a nuestras instituciones financieras aquí en Estados Unidos, cuando sabemos que están robando o que son conocidos narcotraficantes”, indicó Torres.
Más claro no canta un gallo porque la verdad es que si Estados Unidos no quiere más migrantes y desea contenerlos con un muro cuya construcción demanda miles de millones de dólares y tampoco quiere invertir en estos países, por lo menos debiera ponerle atención al fenómeno de la corrupción poniendo en la picota a los corruptos, porque eso es la causa de las angustias y desazones de la gente que, frustrada por la falta de oportunidades para tener una vida digna, emprende el camino hacia el Norte en busca del “sueño americano” que, además, puede comprobar fácilmente con sólo ver el cambio que la migración ha representado para aquellos que, en sus comunidades, tienen parientes que envían remesas puntualmente.
Reclamó, por ello, la congresista Torres por el poco apoyo que se ha dado a la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala que ha realizado acciones importantes para combatir la corrupción, pero que fue expulsada del país precisamente porque era un elemento incómodo y molesto para quienes se han acostumbrado a saquear al Estado con impunidad y no aceptaron que se aplicara la ley en casos tan concretos como los del enriquecimiento ilícito o el financiamiento electoral ilícito que promueve esa forma de amasar fortunas.
Creo que poca gente, aún en nuestra Guatemala, tiene tan claro el panorama como lo tiene la congresista Torres y por ello es tan odiada y criticada por la manada de pícaros.