Ana Cristina Morales

crismodenesi@gmail.com

Médica y cirujana licenciada por la Universidad de San Carlos de Guatemala, especializada en psiquiatría con arreglo al Programa USAC/IGSS. Con las especializaciones de atención en psicoterapia a mujeres maltratadas, así como en adicciones y Supervisora psicosocial. Autora de -Aprender a perdonar. “Una herramienta en psicoterapia”, publicación personal, y coautora del artículo: “Consecuencias biopsicosociales del abuso sexual”, del libro Síndrome de intestino irritable y otros trastornos relacionados, publicado por Editorial Panamericana. Del libro “El perdón y la salud” de editorial Plataforma. Columna de opinión “Conversando con la Psiquiatra” en el periódico guatemalteco “La Hora”, Trabaja en oficina privada como psicoterapeuta y psiquiatra.

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Dra. Ana Cristina Morales Modenesi

La prensa amarilla es descrita como un tipo de periodismo que presenta noticias sensacionalistas con titulares escandalosos y llamativos. Exponen datos escritos y gráficos de manera cruenta y estos tienen un impacto negativo en la salud.

Las catástrofes, los accidentes, los crímenes, y otros enredos son los temas de su elección. En este artículo se describe de forma parcial ideas desarrolladas por Rolf Dobelli, autor y empresario de origen suizo, en las cuales afirma que la acumulación de noticias informativas perjudica la salud. Ya que inclinan a sentirnos más temerosos y agresivos, disminuyen la creatividad y la capacidad de reflexión. Y se ha demostrado que las personas que las dejan de consumir se sienten de manera más feliz.

El abuso de noticias es realmente tóxico para nuestro cerebro. No es posible actuar de forma racional ante las imágenes emitidas en los medios de comunicación. Ser espectador indirecto de tragedias también victimiza y desencadena vulnerabilidad emocional ante eso observado.

También existe el peligro de que este tipo de información falsee nuestra apreciación de riesgo. Se puede llegar a sobreestimar o subestimar situaciones de la vida real. Rolf Dobelli nos dice que las noticias son inútiles en tanto que: “De entre las 10,000 noticias que haya leído o escuchado en los últimos doce meses, cite una que le haya ayudado a tomar una decisión más acertada con relación a su vida privada o profesional”.

Dice que al pensar que por acumular un gran número de noticias en nuestro cerebro nos hacemos la ilusión de que llegaremos a entender el mundo de mejor forma. Y ocurre lo contrario, todo lo importante que debemos saber sobre la vida no está en éstas, sino que surge de manera lenta a través de nuestras propias reflexiones.

Que las noticias no provocan reflexión y ayudan a consolidar prejuicios. Que para reflexionar necesitamos concentración, lo que requiere la no interrupción. Sin embargo, las noticias están diseñadas para interrumpir.

Al existir una interrupción constante mientras se está meditando, las ideas permanecen en la memoria a corto plazo, sin la posibilidad de que se integren a la de largo plazo, cuyo lugar es el de almacenamiento.

Las catástrofes de los titulares provocan que se liberen altas cantidades de cortisol. Esto altera el sistema inmune y reduce la producción de la hormona del crecimiento, que se encarga de regenerar el organismo. Las noticias por sí solas, pueden someter a una persona con una vida tranquila a una situación de estrés crónico.

Este artículo se escribe con la finalidad de la toma de conciencia acerca de la responsabilidad de transmitir noticias de una manera simple y no desbordar a la gente con información poco necesaria y generadora de mayor estrés.

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