El registro de los antecedentes policiales es de gran importancia y su vulneración afecta seriamente la certeza jurídica porque así como le fueron borrados los que tenía el hermano del presidente Morales, le pueden poner, inventando señalamientos, a cualquier otra persona toda vez que está demostrada la vulnerabilidad del sistema producto de la sumisión de los mandos policiales a las órdenes políticas.
Los actuales mandos repiten como estribillo la frase que hasta el cansancio decía Cantinflas en la película Patrullero 777, demostrando que están allí para acatar las órdenes de su jefe, el Ministro de Gobernación, lo mismo si es para borrar antecedentes policiales que para cambiar el parte que da cuenta de la captura del hijo de un diputado.
Lamentablemente estamos volviendo a los tiempos pasados cuando la Policía Nacional era un simple instrumento al servicio de los intereses del momento de cada gobernante y ejecutaba sin remilgos cualquier orden ilegal que se les diera. Durante los últimos años se había avanzado bastante en la profesionalización de la Policía Nacional Civil, pero todo fue borrado de un plumazo con el simple cambio de Ministro de Gobernación porque el actual ha removido a los oficiales de carrera para colocar en los puestos de dirección a quienes estén dispuestos a cumplir aún órdenes ilegales, como es la de desaparecer en el sistema los antecedentes policiacos del hermano del Presidente sin que medie orden de juez competente porque su juicio no ha terminado y aún está en la fase de debate oral y público. O la de cambiar el parte que consignaba que el hijo de un diputado fue denunciado por vecinos a los que amenazó con el arma de fuego que portaba sin permiso.
El retroceso no se queda allí porque están por aprobar reformas a la Ley para permitir que militares puedan asimilarse a los mandos de la PNC para que se vuelva a la militarización que costó tanto erradicar y que fue causa de muchos de los desmanes cometidos por la vieja Policía.
Ayer fue patética la forma en que se tiraban la pelota unos a otros queriendo zafar bulto de la acción ilegal para beneficiar al hermano del Presidente, con lo que demuestran que tanta afirmación de que se sometían al imperio de la ley no era más que casaca para dar apariencia de no buscar favoritismos ni trato especial. No puede haber trato especial más descarado que el de haber logrado que, sin cumplir los requisitos, se le limpie y borre el expediente a quien tuvo orden de captura por delitos específicos.