Edith González

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Nací a mediados del siglo XX en la capital, me gradué de maestra y licenciada en educación. He trabajado en la docencia y como promotora cultural, por influencia de mi esposo me gradué de periodista. Escribo desde los años ¨90 temas de la vida diaria. Tengo 2 hijos, me gusta conocer, el pepián, la marimba, y las tradiciones de mi país.

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Edith González

“Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón, porque de él emana vida”.

Salomón (970 aC-931 aC) Rey de Israel

Desde el año 2000 se celebra el  Día Mundial del Corazón  cada  29 de septiembre, buscando  sensibilizar al público sobre las enfermedades que en él se producen y a la vez   promover la adopción de medidas preventivas que disminuyan las enfermedades cardiovasculares, en particular las cardiopatías y los accidentes cerebrovasculares, las principales causas de muerte en todo el mundo.

A la vez es  muy importante   concientizar a todos los seres humanos  que hacer ejercicio es bueno para prevenir las enfermedades del corazón y otras emergentes en el nuevo siglo.

Este año los organizadores están  pidiendo a la gente en todo el mundo  hacer una promesa…de mi corazón, para el corazón, para todos nuestros corazones.

Una promesa  para cocinar y comer de manera más saludable, hacer más ejercicio y animar a sus hijos a ser más activos, a decir no al cigarrillo  y ayudar a sus seres queridos a que  se detengan de todas las situaciones que  nos llevan al riesgo, y decir sí a todo lo que nos ayuda a vivir mejor.

Una promesa como un profesional de la salud para salvar más vidas. Una promesa para implementar un plan de acción en la vida de cada uno para detener las muertes por problemas cardíacos.

Cada año mueren 17,5 millones de personas a causa de la enfermedad cardiovascular, que incluye las enfermedades cardiacas y cerebrovasculares. Hoy en día, la enfermedad  cardiovascular  es la  primera causa de muerte en todo el mundo y se estima que la cifra ascenderá a 23 millones en el año 2030.

Lo que por supuesto  no tiene por qué ser así.  Y lo podemos lograr haciendo  pequeños cambios en nuestra  vida, para conseguir   una vida más larga, saludable y con calidad. Solo se trata de preguntarnos  “¿Qué puedo hacer desde este preciso momento para cuidar MI CORAZÓN y TU CORAZÓN?”

Así que este Día Mundial del Corazón debemos asumirlo como una  oportunidad para hacernos la promesa de cocinar y comer de forma saludable, más frutas, vegetales y verduras, menos grasas, harinas y azúcares.  Y de hacer más ejercicio, lo que no  significa  únicamente ir a un gimnasio. La organización Mundial dela Salud, por ejemplo, sugiere caminar  10 mil pasos diarios, aprovechar cualquier ocasión para subir escaleras, bailar  y realizar actividades al aire libre como la jardinería que nos obliga a estirarnos y agacharnos.  Dormir ocho horas diarias, y evitar las situaciones estresantes.

Además de animar a nuestros hermanos, nuestra pareja, a los vecinos y por supuesto  a nuestros   hijos a ser más activos, practicando deportes al aire libre  y evitar el tabaco.

Una simple promesa… para MI CORAZÓN, para TU CORAZÓN, para TODOS NUESTROS CORAZONES.

Un agradecimiento a todos los médicos  y personal de salud que cuidan el corazón y la vida de sus pacientes. Y al doctor Gonzalo Calvimontes, una felicitación por su excelente trabajo en  la pediatría de Unicar donde cuida el corazón de muchos   niños que requieren atención, y el corazón de las madres que  confían en su conocimiento y gran corazón.

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