Edith González
“Usad la energía de la juventud”.
Papa Francisco
En el mundo existen cerca de 1 mil 800 millones de jóvenes entre los 10 y 24 años de edad, la población juvenil más grande de la historia, pero uno de cada diez viven en zonas de conflicto y 24 millones de ellos no asisten a la escuela. Una vida marcada por la inestabilidad política, los desafíos del mercado laboral y el limitado espacio para la participación política y cívica, lo que provoca que los jóvenes se aíslen de las sociedades, tomen caminos equivocados y mueran.
Ejemplos de ello lo vemos a diario en nuestro país, los periódicos y los noticieros nos informan de jóvenes que quedan heridos o lisiados luego de enfrentamientos armados entre ellos, cuando forman parte de las pandillas o con la policía cuando son perseguidos luego de cometer ilícitos, ante la indiferencia de sus padres y tutores quienes parece prefieren dejarlos ser en el abandono para evitar tener que cuidarles y responsabilizarse de ellos.
En 1999, la Asamblea General de la ONU designó el 12 de agosto como el Día Internacional de la Juventud, una celebración anual que busca promover el papel de los jóvenes como socios esenciales en los procesos de cambio y crear una oportunidad para generar conciencia sobre los desafíos y problemas a los que estos se enfrentan.
En ese entonces la Asamblea pidió la mayor participación posible de los gobiernos y sociedad civil en la conmemoración de esta fecha a fin de promover una mayor difusión del Programa de Acción Mundial de las Naciones Unidas para los Jóvenes
Los jóvenes son agentes fundamentales del cambio social, el desarrollo económico y la innovación tecnológica, así como del mantenimiento y el fomento de la paz. Su imaginación, sus ideales, su energía y su visión son imprescindibles para el desarrollo continuado de las sociedades de que forman parte. Pese a su gran importancia, los jóvenes son al mismo tiempo víctimas de los grandes cambios de la sociedad.
La Asamblea General nos exhorta a celebrar el Día Internacional de la Juventud para participar en la configuración de una paz verdadera y contribuir a la prevención y la transformación de los conflictos, la inclusión, la justicia social, la reconciliación y la paz sostenible.
El Secretario General de la ONU, António Guterres dijo: Las esperanzas del mundo están puestas en la gente joven. La paz, el dinamismo económico, la justicia social, la tolerancia: todo esto y más depende, hoy y mañana, de que aprovechemos la energía de la juventud. La gente joven de todo el mundo necesita espacios seguros: espacios públicos, cívicos, físicos y digitales en los que poder expresar sus opiniones y perseguir sus sueños libremente.
Debemos invertir para que las mujeres y los hombres jóvenes tengan acceso a la educación, la capacitación y empleos decentes y puedan desarrollar todo su potencial. Las Naciones Unidas tienen la firme determinación de escuchar lo que tienen que decir las mujeres y los hombres jóvenes y abrir vías para que participen de forma constructiva en las decisiones que les conciernen.
Quisiera desear a todos ¡feliz Día Internacional de la Juventud!