Edith González

Bajo tu sombra me cobijo, de tu fruto me alimento, en tus hojas encuentro mi salud y con tu cuerpo me caliento, eres vida, eres árbol.

Considerando la importancia de los árboles y los bosques durante el Congreso Forestal Mundial que se celebró en Roma en 1969 se emitió la recomendación de celebrar su día. Así la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) en 1971, eligió el 21 de marzo para la festividad, coincidiendo con la entrada de la primavera en el Hemisferio Boreal.

Los bosques reducen la vulnerabilidad ante los efectos del cambio climático. Evitan que se produzcan deslaves en zonas vulnerables y reducen el impacto que generan las fuertes lluvias. Si los árboles desaparecen, nuestros recursos hídricos, el aire puro y muchos recursos más desaparecerían, dijo Michelle Martínez, la exministra de Medio Ambiente, en una muy acertada aseveración.

Guatemala ubicada en la cintura del mundo es un país beneficiado por la naturaleza, ya que durante todas las épocas del año cuenta con árboles verdes y florecientes. Además, una de las selvas más grandes del mundo se encuentra en el país y cuenta con gran cantidad de árboles que estos se agrupan en bosques esparcidos por todo el país. Es por eso que Guatemala cuenta una diversidad de bosques, entre los cuales se encuentran: bosque latifoliado de baja elevación, bosque de coníferas, bosque mixto, bosque latifoliado de altura, bosque fragmentado y árboles dispersos de costa sur, bosque de manglar, montes espinosos.

El 16 de junio de 2003 bajo el gobierno de Alfonso Portillo se instituyó la celebración del Día del Árbol en el decreto 30-2003. El mismo contempla que el Ministerio de Educación, en coordinación con los Ministerios de Agricultura y Medio Ambiente, deben promover “Campañas de Reforestación Nacional” en los establecimientos educativos de todo el país.

Lo que ya ocurría desde años atrás. Muchos recordaremos como en un viaje, que para nosotros nos resultaba un paseo, acudimos a los cerros cercanos. El Parque de las Naciones Unidas, un terreno baldío u otro sitio acompañados de los maestros para sembrar árboles en un intento más que de reforestar, porque nunca regresamos a cuidar a nuestro retoño, para tratar de enseñarnos y crearnos conciencia de la importancia de los árboles para el planeta y nuestras vidas.

Cada mayo muchos establecimientos educativos se aprestan a la siembra de árboles haciendo suyo el decreto 30-2003 como ocurrió en el Comando Superior de Educación del Ejército de Guatemala en donde el Comandante con apoyo de Cementos Progreso, oficiales alumnos, docentes y personal administrativo junto a estudiantes de la Universidad Rafael Landívar de la Facultad de Ciencias Ambientales llevaron a cabo la siembra de 300 árboles frutales de mango, manzana, naranja, aguacate, mandarina, jocote y limón; que se suman al bosque natural del área verde de la instalación en seguimiento del plan particular de reforestación.

Mayo avanza, las lluvias están presentes; aún tenemos tiempo de sembrar y cuidar un árbol para tener una mejor calidad de vida.

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