Félix Loarca Guzmán

El destacado académico guatemalteco, doctor Rafael Cuevas Molina, director de la revista electrónica Con Nuestra América, que se edita en Costa Rica, señaló en un análisis reciente, que Guatemala es un país cuyo sistema político y social se encuentra inmerso en un largo proceso de descomposición luego de muchos años de conflicto armado, en donde ya no sorprenden tanto las numerosas muestras de farsa política.

En ese proceso, resaltan altos indicadores de violaciones a los derechos humanos, y una impresionante cruzada contra la corrupción, que encabezan el jurista colombiano Iván Velásquez, jefe de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala, CICIG, que auspicia las Naciones Unidas, y la abogada Thelma Aldana, fiscal general y jefa del Ministerio Público de nuestro país.

Las investigaciones de la CICIG y el Ministerio Público, literalmente tienen arrinconados a numerosos personajes de la esfera empresarial, del sector militar, de la clase política y del poder municipal.

Algunos son verdaderos “caciques” formados en el partido de la violencia organizada que fue creado mediante la participación o patrocinio de algunos de los que tomaron parte o fueron cómplices de la vergonzosa invasión armada de mercenarios financiada y organizada por la United Fruit Company, el Departamento de Estado y la CIA de Estados Unidos, para derrocar en 1954 al gobierno nacionalista del coronel Jacobo Árbenz Guzmán.

Repitiendo el guión, actualmente fuerzas semejantes conspiran para derribar al régimen de la Revolución Bolivariana del presidente Nicolás Maduro de Venezuela, mediante una prolongada guerra económica, amenazas de una intervención militar, y una perversa campaña mediática de desprestigio, en la cual participan gobiernos dóciles y sumisos como el del cómico presidente de Guatemala, Jimmy Morales, quien sin ningún pudor, forma parte del vergonzante Grupo de Lima, que reúne a los representantes de los regímenes más desprestigiados e impopulares de América Latina.

Este grupo, tal como dice el analista costarricense Andrés Mora Ramírez, más parece un Club de Amigos de la derecha extremista y corifeos de la restauración neoliberal que avanza peligrosamente por nuestra América, para seguir esclavizando con pobreza, miseria y el saqueo de los recursos naturales, a los pueblos de la región.

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